La candidata socialista a la alcaldía de València, Sandra Gómez, ha anunciado que creará una oficina de control y seguimiento de las contratas municipales para "reforzar los mecanismos" que eviten que se puedan dar "presuntas mordidas o casos de corrupción", con el caso Azud, que ha salpicado al PP este semana.
Para establecer "cortafuegos", Gómez ha remarcado que a través de esta oficina se hará "un seguimiento de las adjudicaciones para comprobar que le material de las inversiones se adecua a las características establecidas en los contratos y documentos que sirven de base para la contratación".
Además, la alcaldable socialista a la ciudad de Valencia ha advertido que estos supuestos desvíos de dinero "afectan directamente a la calidad de los servicios que las empresas prestan a los ciudadanos ciudadanas".
Gómez ha hecho hincapié en que se establecerá un seguimiento sobre el funcionamiento los servicios de limpieza, mantenimiento de instalaciones, la grúa, la ORA o la gestión de suministros, ha citado entre las grandes adjudicaciones del Ayuntamiento de València.
"Son contratos muy cuantiosos que se adjudican por períodos de tiempo amplios", según ha señalado Gómez, quien ha puesto el acento también en la necesidad de reforzar el área de contratación con más personal para "evitar que las contratas de prorroguen ya que esto puede llegar a encarecer hasta un 25 por ciento los trabajos que realizan".
"La salida del plan de ajuste nos permite reponer personal y reforzar el área de contratación para que deje de ser un cuello de botella será una de nuestras prioridades", según Gómez que ha planteado "una mejora en la gestión que permita simplificar y automatizar tramites para mejorar el procedimiento".
La candidata del PSPV ha indicado que se facilitará otras de las funciones que tendrá esta oficina, "la redacción de los pliegos de las nuevas adjudicaciones preparados antes de que empiecen las prórrogas y así evitar los sobrecostes".
