Cuando uno ve la firma de Yayo Cáceres en la dirección de un texto teatral, sabe que se aproxima a una obra muy elaborada, bajo una dirección de actores muy pulida, una puesta en escena al servicio del texto (algo primordial en la dramaturgia), una ordenada utilización del espacio escénico y una equilibrada utilización de la iluminación sin olvidar el buen gusto por el uso de la música en directo y el oportuno momento de incluirla. Así ha forjado su trayectoria Cáceres (más de 20 años de labor teatral de este argentino por tierras españolas), creando teatro de calidad y propuestas de riesgo (su compañía Ron Lala es un verdadero laboratorio de un teatro diferente y alto nivel de profesionalidad).
‘Mestiza’ es el título de la nueva obra que llegó al Teatro Talia bajo su firma, ¡y qué obra!
Con un precioso texto de Julieta Soria, ‘Mestiza’ aborda la figura de Francisca Pizarro Yupanqui (hija del conquistador Francisco Pizarro y la princesa inca Quispe Sisa) no solo desde las perspectivas personales de una mujer que vivió los primeros años de la conquista del imperio incaica, sino también desde las vivencias de una protagonista excepcional de una España cargada de contrastes y divergencias durante su vida como esposa de Hernando Pizarro. Ya anciana, en su residencia de Madrid, Francisca vive recluida y alejada de una sociedad que no la reconoce y murmura sobre su vida. La llegada del joven poeta Tirso de Molina, en busca de un nuevo reto literario e invadiendo la intimidad de la mujer, sirve de eficaz impulsor para dar a conocer las gestas de los conquistadores y los hechos que rodearon a Francisca. El encuentro genera un dinámico diálogo (cargado de visiones opuestas y contrapuntos) en donde los recuerdos y las experiencias de la que fuera la primera mestiza del Perú saltan desde el escenario hasta las butacas.
Intercalada por pasajes y momentos musicales (excelente repertorio y labor a cargo del músico Manuel Lavandera y la cantante Silvina Tabbush) ‘Mestiza’ es mucho más que la vida de una mujer, es también una obra que habla sobre la identidad, la identificación a una tierra y la mixtura de dos culturas que se encuentran en busca de señas que intenten unirlos más que separarlos.
Maravillo trabajo actoral de la dupla compuesta por Julián Ortega y Gloria Muñoz (conmueve su interpretación de Francisca) y gran labor en la dirección de Cáceres que con una puesta en escena minimalista logra trasladar a los espectadores al jardín que sirve de refugio de la gran dama peruana. Pasó como un suspiro por Valencia y deseamos, vivamente, que regrese a las tablas del Talia para disfrutar, una vez más, de tan bello. ‘Mestiza’, es gran teatro, teatro con mayúsculas.
