La lluvia que ha hecho acto de presencia en las primeras horas no ha disuadido a numerosos valencianos y devotos que este miércoles han terminado llenando, con y sin paraguas, la plaza de la Virgen para el Besamanos público a la Virgen de los Desamparados. Ya lo anunció el presidente de la Hermandad de Seguidores de la Virgen, José Luis Albiach: "Aunque llueva, el Besamanos se celebra sí o sí".
Y es que se trata de un acontecimiento muy querido por los valencianos, y este año cobra una especial importancia porque tiene lugar tras la reciente celebración y clausura del Año Jubilar del Centenario de la Coronación Canónica de la Mare de Déu.
La Basílica abría sus puertas esta mañana a las 6:40 horas, porque ya había un grupo de personas esperando y, desde entonces, pese a la lluvia de las primeras horas -aunque ésta no ha sido intensa- “el paso de los devotos no se ha detenido ni un solo instante”, afirma Albiach.
A mediodía, la plaza de la Virgen se encontraba ya llena de fieles que “están haciendo una media de hora y media de espera” y ya habían sido entregadas 7.000 de las 25.000 estampas de la Mare de Déu que han sido editadas para el Besamanos.
Los Seguidores de la Virgen han estado colaborando en todo momento en la organización y control de acceso en el Besamanos, al igual que la Corte de Honor y los Eixidors del Trasllat.
Se han acercado al Besamanos numerosos niños, con sus padres, que han acudido antes de la entrada en los colegios, y muchos ancianos y personas enfermas. Precisamente, entre ellos, ha figurado un centenar de acogidos en la residencia de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que han ido acompañados por las religiosas. Se han desplazado en vehículos y en silla de ruedas, para no perderse esta cita a la que acuden todos los años.
