La situación de Valencia Basket se torna crítica en su aspiración por avanzar a los cuartos de final de la Euroliga, a pesar de la resonante victoria sobre DVTK Hun-Therm (84-59) este miércoles
La ecuación es compleja
La ecuación es complejaValencia Basket debe imponerse frente al equipo italiano Schio en la última jornada de la fase de grupos, y simultáneamente, requiere que Casademont Zaragoza caiga ante el ya eliminado Lublin polaco, que no tiene incentivos en juego, para asegurar su clasificación.
La reciente derrota de Zaragoza ante Schio (73-59), sellando la clasificación de este último, complica dramáticamente las aspiraciones de Valencia Basket.
Dirigido por Rubén Burgos, el equipo afronta el desafío final de la fase de grupos sin control sobre su destino, una situación precaria que podría haberse evitado si Zaragoza hubiese superado al conjunto italiano.
Actualmente, Valencia Basket se posiciona quinto en la tabla, con un registro de siete victorias y seis derrotas, en un grupo compuesto por ocho equipos.
Schio, por su parte, ya clasificado, ostenta un registro de nueve victorias y cuatro derrotas, igualado en la segunda posición con DVTK Hun-Therm de Hungría.
De nuevo Casademont se cruza en el camino de Valencia Basket
Esto convierte la batalla por la última plaza de clasificación, la cuarta, en un duelo directo entre Zaragoza y Valencia Basket.
Con ocho victorias y seis derrotas, Casademont Zaragoza se sitúa un paso adelante de Valencia Basket, beneficiándose además de la ventaja en el enfrentamiento directo ('average') sobre el equipo valenciano.
Este escenario subraya la tensión y la gravedad de la situación para Valencia Basket, que se ve obligado a navegar en aguas turbulentas para mantener viva su esperanza en la Euroliga.
