El pleno del Ayuntamiento de Torrent ha aprobado la nueva ordenanza reguladora del Medio Rural, que recoge tanto aspectos tradicionales como las necesidades actuales de los agricultores de la ciudad. 
El concejal de Medio Ambiente, José Gozalvo, ha explicado que “esta ordenanza sustituye a la que estaba vigente desde 1996, que estaba desfasada y no se ajustaba a las necesidades de los agricultores”.
Con un año de trabajo, la nueva ordenanza regula, por ejemplo, los posibles conflictos entre propietarios, donde una Comisión de Valoración del Consell Agrari mediará entre las partes para ofrecer una resolución extrajudicial.
También recoge los usos y costumbres practicados en el ámbito rural, adecuándolos al marco actual, y estableciendo las prohibiciones oportunas, así como otros aspectos como los cerramientos de las fincas rústicas, la creación de invernaderos, balsas de riego o las distancias entre las plantaciones y los caminos, entre otros aspectos.
Las funciones del servicio de vigilancia rural también quedan establecidas con la nueva regulación, que controlará las actividades calificadas de especial protección agrícola, forestal paisajística o ecológica por el PGOU.
Junto con la regulación de la obtención de la licencia municipal para realizar cualquier tipo de obras, también establece una serie de prohibiciones, como el acceso sin permiso del propietario a una parcela a recoger rastrojos o productos como cítricos y hortalizas. Tampoco permite atravesar fincas ajenas, así como la caza y adiestramiento canino, hasta que no se levanten las cosechas, entre otras.
Los caminos municipales quedan también clasificados, según esta ordenanza, en tres categorías, en función de su anchura, orden de importancia y tránsito que soportan.
