Por muy orgullosos que estemos de nuestra casa y mobiliario, y a pesar de lo cómodos que nos sintamos con ellos, desgraciadamente siempre termina llegando el momento en el que empiezan a deteriorarse o estropearse cosas como techos, paredes o suelos.
No obstante, y a pesar de que sabemos que llega un momento en el que es necesario renovar esas partes de nuestro hogar, solemos postergarlo temiendo las molestias que nos causará esto. Afortunadamente, hay soluciones como el microcemento y empresas como topciment que son expertos en aplicarla.
¿Qué es exactamente el microcemento?
El microcemento es un material decorativo que se ha convertido en tendencia a nivel mundial. Lo cierto es que sobran los motivos para que su popularidad sea cada vez más elevada pues, entre otras cosas, resulta una alternativa más rápida, cómoda y económica.
Generalmente se usa para cubrir azulejos, morteros, yeso, cemento, plástico, metal, pladur, gres, hormigón o baldosas. Además, para aplicarlo no hace falta eliminar el revestimiento previo, por lo que se ahorra mucho tiempo y dinero.
Transformar muebles y espacios nunca había sido tan sencillo
Este recubrimiento de construcción muy polivalente y solo 3 milímetros tiene la ventaja de poder aplicarse en un gran número de superficies tanto de forma vertical como horizontal.
No tendrá que retirarse ningún material, abaratando así los gastos. Y no solo en el hogar. Ya son muchos los restaurantes, locales comerciales, polideportivos, hoteles y lugares similares los que se han decidido por esta opción.
El mantenimiento del microcemento
Por norma general, basta con agua y jabón para mantener el microcemento en perfectas condiciones. Dependiendo del tipo de superficie, también se puede recurrir a un mantenimiento con los productos profesionales adecuados.
Principales ventajas del microcemento
No habrá escombros.
El peso estructural del microcemento es mucho menor que el del cemento pulido.
No son necesarias maquinarias ni herramientas pesadas.
Gracias a su composición, pueden crearse efectos más texturizados.
Como se combinan distintos tipos de pigmentos, la variedad de colores que pueden lograrse es prácticamente infinita.
El microcemento es muy confortable, cálido y agradable. La temperatura media que se logra es muy estable.
El acabado es totalmente impermeable frente al agua corriente.
Una opción práctica y moderna.
Es flexible y se adhiere a prácticamente cualquier tipo de material y superficie.
No precisa de juntas de dilatación.
Al tratarse de un sistema tan sencillo y rápido, tanto el costo, el tiempo como la obra son inferiores.
Material duro y resistente ante cosas como la compresión, la flexión, la fuerza mecánica, la fuerza o la abrasión. También se mantiene estable ante los rayos ultravioleta.
No hace falta permiso de obra ni hay que retirar el material existente.
Los baños de microcemento
Al tratarse de un acabado que es totalmente impermeable frente al agua corriente, el microcemento es una alternativa que cada vez está en más baños. Y esa no es la única razón:
Hace que el baño parezca más grande de lo que es en realidad.
Tiene una enorme resistencia a la humedad ambiental.
Es muy fácil de limpiar (entre otras cosas, no tiene esas juntas en las que se acumula tantísima suciedad y a las que generalmente es tan complicado acceder).
Resulta muy versátil, pues se adhiere perfectamente a prácticamente cualquier tipo de soporte. Y no solo en suelos y paredes, también se pueden revestir de microcemento otros elementos del baño como las bañeras, los platos de ducha o los muebles de baño.
Al no ser necesarias las obras, el baño estará totalmente disponible y utilizable en muy poco tiempo.
El microcemento potencia la luz natural de tal modo que parece que se refleja sobre él.
No hay duda de que estamos ante una opción que además de resultar mucho más económica y rápida tiene otras muchas ventajas sobre otros procedimientos como el cemento pulido. Esperamos haberte ayudado a descubrirla.
