Agentes de la Policía Local de Valencia han detenido a un joven de 26 años después de que aporreara la puerta de la vivienda de su exnovia, de 23 años, y la amenazara. A la llegada de los efectivos, la víctima denunció por primera vez reiterados episodios de violencia, faltas de respeto, amenazas continuas y explicó los intentos frustrados de finalizar la relación, por lo que los policías arrestaron al hombre como presunto autor de un delito de violencia de género.
Los hechos ocurrieron durante la noche de este jueves, alrededor de las 22.35 horas. Agentes de la primera Unidad de Distrito y de la Unidad de Convivencia y Seguridad (UCOS) fueron comisionados por la Sala de Transmisiones del Cuerpo porque, al parecer, un hombre estaba aporreando la puerta de la vivienda en la que se encontraba la joven, al tiempo que la amenazaba a gritos.
Cuando los policías llegaron, el joven se había marchado del lugar en coche, pero gracias a los testimonios que pudieron recabar y en colaboración con la Policía Local de otro municipio activaron un dispositivo de búsqueda sobre el presunto agresor, según han informado las fuerzas de seguridad en un comunicado.
Al parecer, el presunto agresor había subido a la residencia de la mujer para y había comenzado a golpear la puerta de la vivienda mientras gritaba, sin que ella le abriese. A continuación, había bajó al patio muy agresivo y alterado, momento en el que empezó a agredir al portero del edificio.
Después, el joven supuestamente salió del edificio y volvió instantes después en su vehículo. Tras aparcarlo en el portal, entró en el edificio una vez más para continuar con el comportamiento anterior hasta que se marchó del lugar.
Puesto que los hechos parecían haberse originado por un posible caso de violencia de género, los agentes solicitaron la presencia de otro indicativo para atender a la víctima.
La joven acabó interponiendo una denuncia contra el presunto agresor ya que, al parecer, los episodios de violencia eran reiterados. Desde la Policía Local de Valencia han precisado que la víctima presuntamente ha sufrido un "infierno" de faltas de respeto y amenazas continuas, episodios de violencia e intentos frustrados de terminar la relación. La mujer no había denunciado los hechos antes.
Asimismo, los policías dejaron constancia de que, durante el tiempo que duró la intervención, el supuesto autor de los hechos hizo varias llamadas a la joven que ella no contestó, utilizando diferentes números de teléfono para ello. Finalmente, los agentes consiguieron localizar al presunto agresor, que fue detenido y trasladado a Dependencias.