En algunas ocasiones el personal sanitario tiene que enfrentarse a situaciones difíciles. Una de las áreas más sensibles es la de Urgencias, donde los nervios y emociones de pacientes y familiares están a flor de piel. “La preocupación por el estado de un familiar, una opinión contraria al diagnóstico ofrecido, estrés, cansancio, todo puede desencadenar una situación difícil para el equipo médico del centro”, explica Mª Cruz Soto, coordinadora de Prevención de Riesgos Laborales del Hospital de Manises.
Por eso, el centro hospitalario ha organizado un taller impartido por psicólogos expertos en el que los trabajadores han aprendido cómo actuar ante situaciones de conflicto, así como los distintos perfiles de usuarios agresivos.
En él han participado médicos del Servicio de Urgencias, pero también trabajadores que desempeñan puestos de especial sensibilidad, como los de Admisión de pacientes e, incluso, profesionales que han sufrido algún intento de agresión verbal o física.
Conductas que ayudan
Estar tranquilo, no responder a la amenaza y evaluar bien la situación, son conductas que, según los expertos, permiten un mejor control de la ira del usuario. Reconocer los errores, practicar la escucha activa o buscar una salida viable a la situación son también buenas recomendaciones en estos casos.
Desde el programa también destacan que en la relación con el paciente y, para evitar que se produzcan situaciones de conflicto, es aconsejable estar alerta, marcar siempre unos límites profesionales y ser asertivos. Para Soto, “a veces se consiguen los peores resultados con las mejores intenciones, por eso es importante estar siempre atento”.
Botón de alerta
Además de disponer de formación para enfrentarse ante situaciones difíciles, se está comenzando a instalar y en algunos servicios ya se encuentra operativo, un botón de alerta para los trabajadores del Hospital de Manises, instalado en sus equipos informáticos. Si se pulsa este botón, marcado en la pantalla con el icono de un flotador, se activa un dispositivo de alerta mediante el cual un equipo de refuerzo y una persona de seguridad se presentan de inmediato en el lugar donde se ha solicitado el auxilio.
“Esto es necesario fundamentalmente en las consultas o despachos donde los profesionales pueden quedar atrapados si un usuario se torna violento aunque, afortunadamente, el uso de esta herramienta no ha sido preciso hasta ahora”, explica la coordinadora de prevención.