Los grupos municipales de Socialistes de Rocafort y Ciudadanos han presentado en el registro del Ayuntamiento de esta localidad una moción de censura solicitando la destitución del actual alcalde, Agustín Aliaga, del Partido Popular de Rocafort, y la investidura en su lugar del socialista Rafael Ferrando. El pleno de votación será el martes 29 de marzo a las 12.00 horas.
En el pleno de febrero, "se constató la ingobernabilidad del municipio, con un equipo de gobierno incapaz de llegar a acuerdos con la oposición para sacar adelante la gestión municipal", afirman los firmantes de la moción.
Tras el abandono en febrero de los dos concejales de Ciudadanos al "descubrir la intención del alcalde de cesarlos", el equipo de gobierno se quedó en minoría con cinco concejales, cuatro del PP y uno de Vox, de un total de trece.
En esta línea, recalcan que en los últimos plenos "se ha constatado la inoperatividad del actual gobierno, llegando a retirar puntos del orden del día o a perder las votaciones de sus propuestas". El alcalde, incluso, "se ha negado a responder las preguntas de Ciudadanos mientras sí ha contestado al resto y, además, se han tomado decisiones arbitrarias que no responden al interés general", inciden.
Los proponentes de la moción denuncian "el no cumplimiento de acuerdos plenarios por parte del alcalde, sobre todo, de la no constitución de una Comisión Informativa Especial que debería investigar quién dio presuntamente instrucciones para adelantar dos licencias urbanísticas".
"Damos este paso para garantizar la gobernabilidad y estabilidad de Rocafort. Nos comprometemos a gobernar por y para nuestro municipio, desde la total transparencia, con el único objetivo de mejorar la vida de la ciudadanía", aseguran los impulsores de la moción en un comunicado.
"Garantizar la estabilidad"
Desde la dirección nacional del PSPV-PSOE avalan la moción que, "además de garantizar la estabilidad en el municipio, permite sacar a la extrema derecha del gobierno, concretamente de las delegaciones de Servicios Sociales y Educación que le había dado el PP".
Sigue de este modo, subrayan fuentes de la formación, "la línea política de aislar a la extrema derecha en las instituciones por la que apuesta el partido como garantía de la democracia".