La Mancomunitat de la Font de Quart ha repetido un rito que data del siglo XV y que se celebra cada 12 años para designar presidente. Este organismo se encarga de la administración de la Font de Quart, un manantial natural del que se abastecen hace siglos Almenara, Quart de les Valls, Benavites, Benifairó de les Valls, Quartell y Faura. Sus aguas podrían tener origen en los depósitos subterráneos de la Serra d’Espadà, y aunque actualmente su caudal ha descendido de los 25.000 litros por minuto que tenía en 1854, oscila dependiendo la época del año y el régimen de lluvias.
El designado ha sido el alcalde de Faura, Antoni Gaspar, que precisamente ha presidido la Mancomunitat durante los últimos dos años. Deberá mantener la presidencia dos años más, los primeros del ciclo de 12 años en que los seis municipios se reparten por turnos la presidencia.
Poco después de las 10 de la mañana, bajo los pinos que crecen en el bello paraje de la Font de Quart, daba comienzo el sorteo, son su antiguo rito. Consiste en lanzar seis papeletas con los nombres de las localidades. La que queda más lejos es la ganadora. El encargado de hacerlo fue Joaquín Alabadí, vocal de Quartell. En el primer lanzamiento la más elejada llevaba el nombre de Faura, por lo que su alcalde repetirá mandato al frente de la Mancomunitat. Un nuevo lanzamiento con las cinco restantes otorgó el siguiente turno a Quart de les Valls, cuya alcaldesa es Pilar Álvarez. Así se fue haciendo hasta cuatro veces más y los turnos correspondieron por este orden a Benavites (Carlos Gil Santiago), Almenara (Vicente Gil Olmedo), Benifairó de les Valls (Antoni Sanfrancisco) y Quartell (Francisco Huguet). Este último fue el único de los seis alcaldes que no estuvo presente, auqnue la localidad estuvo representada precisamente por el vocal que ejecutó el sorteo.
Hidraqua y el Ayuntamiento de Almenara han colaborado en promover un estudio de investigación sobre la historia de La Font de Quart que será difundido en los municipios que forman de la Mancomunidad por medio de un audiovisual, una exposición y una publicación.
Las aguas de la Font fueron utilizadas por los romanos asentados en la zona. Posteriormente los árabesconstruyeron acequias y canalizaciones y establecieronturnos de riego. Tan importante fue la atribución musulmana, que en 1248 el rey Jaume I concedió a los habitantes de Morvedre el privilegio de usar las aguas de la Font, a condición de que mantuviesen el sistema de distribución.
En septiembre de 1437 los señores territoriales del valle firmaron una Concordia denunciando los abusos que se cometían con las aguas. En Octubre de ese mismo año, los jurados de Morvedre promulgaron una sentencia que establecía el régimen y la distribución del agua de la Font, considerada el primer documento detallado sobre el reparto de estas aguas. En la actualidad se sigue el mismo sistema de distribución, con alguna pequeña modificación.