Las elecciones han vuelto al cole, o al menos lo intentan. Es lo que debe haber pensado el director de Escuelas San José de València, que ha decidido no ceder sus instalaciones al paritido político Vox para la celebración de un mitin programado para el próximo día 24 de octubre, a pesar de haber apalabrado con anterioridad dicha cesión.
José Ignacio Rodríguez, que así se llama el director del centro escolar, aduce razones de seguridad y de "fuerte tensión política", coincidiendo con la repentina irrupción del partido de Santiago Abascal en los medios masivos de comunicación, especialmente la televisión, con mensajes agresivos que han causado gran controversia.
Las palabras de Rodríguez pueden tener su origen en las informaciones referentes a los desórdenes públicos aparecidos en todos los medios durante la celebración del 9 d'Octubre este año, en los que se relacionó a los activistas de Vox con la extrema derecha y que habrían acabado por disuadir a los responsables del centro escolar dando marcha atrás en su compromiso inicial.
La comunicación de esta decisión a Vox, que ya había publicitado en redes sociales la celebración del acto con la asistencia de José Antonio Ortega Lara junto al propio Santiago Abascal y José María Llanos -el máximo responsable de la formación en la Comunidad Valenciana-, ha levantado una auténtica polvareda. De momento, el propio director del centro ha comentado que en la formación política se han "llevado un disgusto".
Aunque el director del centro insiste en que las instalaciones de la escuela está siempre abierto a cualquier entidad política o sindical legalmente constituida para la celebración de actos políticos o de interés social, ha recordado que se trata de un centro religioso que quiere estar "por encima de los partidos" y que apuesta por "la reconciliación", por lo que la "fuerte tensión política" y de "exclusión" reinantes en la actualidad desaconsejan la celebración de este tipo de actos.
Por otro lado se han argumentado razones de seguridad, por la previsión de que el aforo pueda verse desbordado, cuando el centro cuenta con un salón con capacidad para más de mil personas a cubierto, y varias explanadas al aire libre con capacidad para muchas más.
Por lo tanto, el protocolo de la escuela como espacio abierto ya no es válido a criterio de la escuela por el clima de tensión política. "No queremos vernos arrastrados en una lucha partidista, ni con este partido ni con ninguno", ha argumentado el director de Jesuítas.