Agentes de la Policía Nacional han detenido en Meliana a dos jóvenes de 23 y 25 años, de origen español, tras huir de los policías al ser sorprendidos la mañana de año nuevo circulando, en sentido contrario y poniendo en peligro la seguridad vial y de los viandantes.
Los arrestados quedaron atrapados en un campo de barro en Meliana y trataron de huir a pie y se les imputan los delitos de resistencia y desobediencia y atentado a agente de la autoridad. Además al conductor los delitos contra la seguridad vial, daños y quebrantamiento de condena, ya que tenía retirado el carné de conducir.
Los hechos ocurrieron en Sagunt sobre las 7:30 del pasasdo 1 de enero cuando los agentes que patrullan en servicio de prevención de la delincuencia vieron en la avenida del Mediterráneo un coche, con las luces apagadas, circulando en sentido contrario y con una conducción irregular, poniendo en peligro al resto de conductores y viandantes, por lo que le dieron el alto. El conductor no hizo caso y aceleró bruscamente, dándose a la fuga e iniciándose una persecución haciendo caso omiso el conductor de las señales acústicas y luminosas de los vehículos policiales, incumpliendo las señales de tráfico, tanto verticales como luminosas, saliendo de la localidad a la V-21 en dirección a Valencia.
Los policías dieron cuenta a la sala 091 de Valencia de los datos del vehículo así como de la persecución que se estaba produciendo, a la Guardia Civil, mientras el coche continuaba a una alta velocidad y realizaba cambios de carril sin previo aviso y sin ser indicados por los intermitentes.
Persecución por la V-21 hasta Alboraya
El vehículo se salió de la vía en la localidad de Alboraya, momento en que un coche policial logró ponerse a su altura, y es cuando el coche embistió al vehículo policial en su parte derecha tratando de sacarlo de la calzada, lesionado a una de las agentes y causando daños en el coche patrulla en la parte derecha, puerta delantera y trasera y faldones.
Los sospechosos continuaron circulando hasta Meliana donde tras salirse, quedaron atrapados en un campo de barro, huyendo del mismo a pie siendo alcanzados por los policías a los pocos metros, resistiéndose y agrediéndoles lanzando puñetazos y patadas, siendo detenidos como presuntos autores de los delitos de resistencia y desobediencia y atentado a agente de la autoridad. Además al conductor le imputan los delitos contra la seguridad vial, daños y quebrantamiento de condena, ya que tenía en vigor una suspensión temporal del permiso de conducir.
Los detenidos, uno de ellos con antecedentes policiales, pasaron a disposición judicial.