La amenaza de tormenta respetó este domingo a la singular procesión del Corpus de Almàssera que, como es sabido, por dispensa papal tras el Miracle dels Peixets en el siglo XIV, se celebra dos meses después de la fecha marcada en el calendario para tal festividad. Una fiesta que congregó, a partir de las 19:00 horas, a multitud de vecinos y vecinas en torno a los bailes tradicionales de la Festa Grossa, personajes bíblicos, gigantes y cabezudos, y por supuesto la Custodia.
Los actos comenzaron con la entrà de la murta, con acompañamiento del tabalet i la dolçaina, seguida por la actuación de los grupos de dances del Corpus de la Asociación Amics del Corpus de Almàssera.
Finalmente, la salida de la Custodia marcó el inicio de la procesión del Corpus propiamente dicha, que transcurrió por el circuito acostumbrado del centro histórico de Almàssera, desde la iglesia parroquial, acompañada por los cofrades, autoridades y banda de música así como representaciones de comisiones falleras y cofradías.
