El Ayuntamiento de Torrent como medida preventiva y con el propósito de garantizar la seguridad de los ciudadanos, próximamente retirará un árbol histórico situado en la plaza Corts Valencianes. Se trata de una ‘falsa pimienta’ que por el paso de los años, las podas realizadas y la rotura de ramaje ha experimentado una pudrición del tronco, lo que supone un elemento peligroso para los viandantes y los niños que diariamente pasan por las proximidades donde se encuentra situada esta especie arbórea.
Dada la delicada situación del árbol, desde la delegación de Urbanismo se ha llevado a cabo un estudio detallado de esta especie que dictamina que la mejor solución es proceder a la retirada, pues se ha comprobado que la ‘falsa pimienta’ presenta deformaciones, así como la descomposición interior de una parte importante del tronco principal, lo que ha generado la aparición de grandes oquedades, algunas de ellas de gran profundidad.
Estos orificios han producido que el árbol se encuentre gravemente afectado por las humedades, lo que ha generado que se reblandezca gran parte del interior del mismo, y presente algunas secciones cuya madera se encuentra muerta, presentando una textura semejante al corcho blando.
“Es una decisión difícil, pues se trata de un árbol histórico que han conocido varias generaciones de torrentinos, pero la situación que presenta en la actualidad supone un alto grado de peligrosidad. Se han estudiado todas las posibilidades existentes para poder salvarlo pero ninguna garantiza ni la recuperación del mismo, ni la estabilidad del tronco”, ha declarado el concejal de Medio Ambiente, José Gozalvo.
Se trata de un deterioro progresivo que se ha producido a lo largo del tiempo, y que hace unos años, con el objetivo de sanear y conservar esta especie que por su antigüedad es el símbolo más característico del parque infantil donde se encuentra situada, ya se llevaron a cabo un conjunto de actuaciones.
Concretamente, se hizo un sellado de las heridas principales con una masilla cicatrizante y con yeso para evitar la entrada de insectos, y de agua, dos de los factores más dañinos. Además, se llevó a cabo una poda importante para aligerar el peso del árbol y evitar que se doblara más.
Ahora, y como solución provisional hasta que se efectúe la retirada, se ha vuelto a realizar una poda de limpieza, destinada a reducir las cargas que recaen sobre el tronco y las ramas principales del árbol. Además, se ha procedido a la colocación de un soporte de acero que sirve de apoyo al tronco principal, dada la pronunciada inclinación de esta especie originaria de Sudamérica, lo que ha mejorado considerablemente la seguridad.