Cuando se va a entrenar gimnasia rítmica o incluso si se va a dedicar a ello de forma profesional en competiciones, se requiere el equipo para practicarlo, en especial las punteras.
Las punteras gimnasia rítmica ofrecen muchos beneficios tanto para entrenar, y competir, entre ellos:
-Sirven para evitar las rozaduras del pie al girar y fijar el contacto con el tapiz.
-Protege los dedos contra lesiones.
-Cuida el empeine.
-Mayor facilidad de giro al realizar los ejercicios.
-Estiliza el pie.
Las punteras tienen un tiempo de caducidad, sin importar el cuidado, tienden a desgastarse por el uso; sin embargo, hay una gran diferencia entre el desgaste natural de las punteras por el uso y el maltrato y el daño que ocurre cuando estas son de mala calidad, lo cual puede ser hasta perjudicial para la salud del pie de la gimnasta. Las punteras sin calidad, sin marca y con mal tejido, resultan incomodas, por lo que es más difícil realizar los giros rítmicos y muchas veces se rompe el elásticos y las costuras, lo cual evita que el pie quede protegido.
Siempre es recomendable a la hora de comprar punteras, elegir una marca de calidad, y experta en la materia. También es preferible utilizar dos punteras, una para el entrenamiento y otra para la competición, eso sí, se debe evitar utilizar una puntera nueva el día de la competición ya que la gimnasta puede resbalar en el tapiz.
Aunque este tipo de producto tiene fecha de caducidad, como ya se ha indicado, hay varias formas y consejos que se pueden seguir para evitar que estas se deterioren y duren más tiempo:
1. Lavar a mano. Es recomendable que se evite lavar a máquina, salvo que en las recomendaciones de la puntera diga lo contrario, hay algunos modelos que tienen tratamiento antibacterial y recomiendan que la laven allí hasta a 60°.
2. Siempre se debe lavar con agua fría.
3. Al momento de lavarlas no debe frotarse, para impedir que el tejido se deshilache o se debilite.
4. A la hora de secar, se debe colgar sin escurrir, es preferible que la puntera se seque por sí sola así tarde más tiempo.
5. Guardar en su empaque original. Aunque parezca trivial, el modo en que se guardan influye en la rapidez del deterioro del material