Iborra se apunta ante Alcácer y Guaita el primer duelo de semifinales de la Europa League

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Valencia CF. Sevilla CF. Iborra. Alcácer

Vicente Iborra (Sevilla FC) se apuntó ante Paco Alcácer, que fue amonestado sin motivo y se perderá la vuelta, y Vicente Guaita (Valencia CF) el primer match de la eliminatoria de semifinales de la Europa League. Bien es cierto que fue con un gol en fuera de juego y con tres minutos fatídicos del Valencia CF que obligan al Valencia a conseguir una gesta en Mestalla en el partido de vuelta..

Damir Skomina, el colegiado esloveno que dirigió el partido, se convirtió en el protagonista al conceder el primer gol sevillista en claro fuera de juego. Los de Pizzi acusaron demasiado el tanto encajado y el Sevilla se aprovechó de ello para hacer el segundo que daría la victoria final a los de Nervión.

Y eso que salió muy concentrado el Valencia desde el principio. Bien plantado sobre el terreno de juego y presionando la salida del balón del Sevilla. Pese a ello, no habían transcurrido ni dos minutos cuando Bacca recogió un servicio de Rakitic para plantarse en la frontal del área, Mathieu primero, y después Javi Fuego se anticiparon al colombiano para desbaratar la ocasión.

Los de Pizzi apretaron los dientes y empezaron a presionar todas las líneas de pase del Sevilla y durante la primera media hora tomaron el dominio del juego. Fruto de esa presión, en una contra eléctrica, en el minuto diecisiete, Parejo habilitó a Paco Alcàcer para que este se deshiciera con una finta de Fazio y sacara un potente chut que Beto despejó con una gran estirada.

Un error clave

El conjunto de la capital del Turia apretaba en el centro del campo. Parecía que el partido lo tenía el Valencia pero en el minuto 32 iba a llegar una de las jugadas claves del partido. Tras ejecutar Rakitic una falta desde la banda derecha valencianista, el jugador sevillista la puso al segundo palo para que M’Bia en un clamoroso fuera de juego recogiera el balón y de espuela, ante la incredulidad de la zaga valencianista, hiciera el primero.

El gol no debió subir al marcador porque el africano estaba en posición adelantada para rematar. Ante la duda, el colegiado esloveno y el linier dieron validez al gol. El fallo fue clamoroso porque no solo el jugador africano estaba en fuera de juego, sino hasta tres futbolistas sevillistas estaban en posición antirreglamentaria.

Los de Pizzi acusaron el golpe y en una contra sevillista, tras una perdida absurda en la línea de tres cuartos de los locales, Carlos Bacca se plantó solo ante Guaita para hacerle el segundo gol al Valencia en el minuto treinta y cinco. Demasiado castigo para el Valencia que acusó el primer gol.

A la desesperada

La segunda parte fue un monólogo valencianista. Obligados a acortar las diferencias los hombres de Pizzi salieron volcados hacia la meta local. El Sevilla, muy replegado, esperaba al conjunto blanquinegre para matar el partido con un tercer gol. Así, con el Valencia en el campo sevillista, en una contra, el omnipresente Rakitic le puso un balón a Bacca entre los dos centrales para que el colombiano fusilara a Vicente Guaita, pero esta vez el de Torrent le aguantó lo suficiente para sacar una mano a su disparo cuando ya la grada cantaba el gol. Susto para los valencianistas.

Pizzi sacó a Piatti y Jonas para reactivar el ataque valencianista. El partido seguía atascado para el Valencia que se estrellaba una y otra vez contra los de Émery, que defendían los ataques del conjunto che. Pero todo pudo cambiar en una jugada iniciada por la izquierda. A un mal despeje de Vitolo, Vargas se encontró con un balón dentro del área y el chileno le golpeó con intención pero su disparo, al que le faltó rosca, salió lamiendo el palo derecho de Beto.

El Valencia acusaba el cansancio de una manera evidente. Parejo, muy encimado por los mediocentros sevillistas, no encontraba el camino y el Valencia no encontraba el fútbol. Con más corazón que argumentos lo intentaba el conjunto de Pizzi, por banda derecha con un omnipresente Joao, y por la izquierda por medio de Piatti y Vargas.

En una doble ocasión en el minuto ochenta y cinco pudo venir el gol del Valencia. Primero con un balón que recogió Jonas dentro del área. El ariete brasilero se revolvió sentó a los dos defensas y disparó seco pero Beto salvó el gol. Acto seguido Vargas remató un buen centro de Piatti desde de la izquiera que se fue al larguero con Beto ya batido. Todos los elementos en contra.

El Valencia a tumba abierta pero sin la suerte que mereció por dominio y por juego. El arbitraje, sencillamente lamentable. La guinda al pésimo arbitraje fue la amarilla a Alcácer en una jugada en la que el de Torrent evitó el choque con Beto, el portero provocó al canterano, y árbitro sancionó con una amarilla al delantero valenciano que le impedirá jugar, salvo rectificación de la UEFA, el partido de vuelta. Demasiado castigo para el Valencia en un partido en el que dio la cara y mereció más suerte, pero sobre todo, justicia. Toca gesta en Mestalla. Toca remontada.

Hortanoticias | Francisco Estellés |  @siskoestelles www.semprevalencia.com

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