Hoy, 82 años, aún resuenan los disparos en el Castillo de Lleida.
Hoy, inicio de un septiembre maldito, la sangre de inocentes corre por encima de las piedras sagradas.
Hoy, tres corazones laten esperando que la locura se acabe, que vuelvas a su lado, vivo.
Hoy, con los escupitajos en la cara, el brazo roto por los golpes del palo de una escoba, y el orgullo herido, yaces, entre otros, tapados con tierra ensangrentada.
Hoy, dos de septiembre de mil novecientos treinta y seis, no me dejaron conocerte, sin embargo, no lo dudes, abuelo Pablo, ochenta y dos años después, puedo decirte que radica en mí un amor indescriptible hacia ti.
Hoy, abuelo de bautizo eres, aunque lo quisieron evitar, pero tu hijo José María, te representó físicamente, y tú estabas, estás en esencia, sin embargo, tu hijo, me aporta todo el amor que tú no me has podido dar.
Hoy, todavía no entiendo el porqué de las guerras, del empeño en matar para vencer a no sé quién, el porqué de robar, sin piedad, la vida a seres inocentes.
Hoy, sin conocerte, ¡¡¡sé tanto de ti!!! Tu esposa, mi abuela Margarita, y tu hija, mi madre Lola, me han explicado tanto que te siento vivo, siempre.
¿Quiénes fueron los asesinos?, ¿los que te enviaron a una muerte segura ?, ¿tus vecinos de Juncosa, que dieron la orden de fusilarte ?, ¿o los que apretaron el gatillo del fusil?
Hoy, dos de septiembre de dos mil dieciocho, abuelo Pablo, no levantaré ningún arma para vengarte, ni te haré decir ninguna misa, sencillamente, seguiré sintiéndote a mi lado, siempre, porque, una vez, alguien me dijo que alguien que había muerto me cuidaba desde el lugar donde estaba, y sé que eres tú.
Gracias.
Sinto petit.
02/09/2018
A mi abuelo Pablo Martí Almacelles, de Ca la Marineta.
Fusilado en el Castillo de Lleida 09/02/1936
Sinto Petit | @sinto_Petit | Ganador del I concurso de Tuit-Relatos de Hortanoticias
