La portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, ha propuesto al alcalde Joan Ribó alcanzar un acuerdo consensuado entre todos los partidos con representación en el consistorio, los agentes del sector inmobiliario, los propietarios y los representantes vecinales “que permita flexibilizar el precio actual del mercado de alquileres de vivienda en Valencia y hacerlo accesible a los jóvenes”.
Catalá ha considerado “urgente” que el Ayuntamiento amplíe la oferta de alquileres públicos y que incentive la construcción de viviendas sociales para cambiar la dinámica actual de subida de precios. “No puede ser que en lo que llevamos de año solo se hayan ejecutado el 3,7% de las inversiones de un total de 7 millones con la que está dotada la partida de Vivienda en el presupuesto municipal”.
En los últimos cuatro años, coincidiendo con Ribó como alcalde, el precio del alquiler en la ciudad de Valencia se ha incrementado un 45%, situándose como la tercera capital española donde más ha crecido después de Palma de Mallorca y Málaga. Una importante subida que, a juicio de la portavoz popular, “es consecuencia, entre otros factores, de la pésima política de vivienda llevada a cabo por el anterior Gobierno de la Nau, con el vergonzoso balance de no haber construido ni una sola vivienda de promoción pública”.
“En el Partido Popular defendemos que, desde la Administración pública, y en especial desde los Ayuntamientos, se deben implementar medidas que favorezcan el acceso a la vivienda mediante alquileres ajustados a las posibilidades económicas de los jóvenes y las personas con rentas bajas”, ha concluido.
