La concejala del Ciclo Integral del Agua, Elisa Valía, ha trasladado esta mañana al director general del Agua, Manuel Aldeguer, las propuestas en las que ha trabajado el Ayuntamiento de València para introducir en el Plan Especial para la depuradora que ha presentado la Conselleria de Transición Ecológica “mejoras fundamentales tanto para nuestros vecinos y vecinas de Pinedo como para el sistema de tratamiento de aguas residuales de la ciudad”.
Actualmente, este plan se encuentra en exposición pública y, según ha explicado Valía, el Ayuntamiento ha presentado alegaciones dirigidas a “mejorar la capacidad de tratamiento de las aguas residuales con el objetivo de evitar la necesidad e ampliar esta instalación”.
Valía recordado “las molestias que genera en los vecinos y vecinas del entorno por los ruidos y olores” y ha reivindicado que “las mejoras deben ser más profundas”. Así ha planteado que existen “varias alternativas desde un depósito de regulación hasta una nueva depuradora” pero ha asegurado que València “exige y estará vigilante para que, en cualquier caso, la solución no consuma más suelo de nuestro territorio, ni en terrenos de la ZAL ni en ningún otro lugar”.
“No podemos quedarnos en el corto plazo”, ha expuesto la edil quien ha hecho hincapié en que se trata de una depuradora que tiene “muchísima carga”. “Se trata de una instalación que da servicio al área metropolitana” y, por tanto, es “desde esa perspectiva desde la que se debe abordar la intervención para que no sea València la que tenga que asumir una ampliación”.
Precisamente este pasado domingo, la concejal popular María José Catalá, alertaba de que en los últimos 14 meses ha habido 61 días en las que no se ha podido dar tratamiento secundario completo a todo el afluente a las depuradoras de Pinedo 1 y Pinedo 2. La consecuencia de ello, según Catalá, es que la depuradora vertió aguas no depuradas tanto al azarbe de Pinedo, primero, como al mar, después durante esos 61 días.
