El grupo de agricultores de Moncada ha emitido un comunicado denunciando la difícil situación que enfrentan en la localidad. Los agricultores, responsables de mantener un paisaje único y de sumidero de CO2, se encuentran abandonando sus campos debido a la falta de relevo generacional y la escasa voluntad política.
La situación se agrava con caminos intransitables y falta de regulaciones para el control de plagas, lo que ha llevado a la pérdida de cultivos y al peligro que representan los jabalíes para los agricultores. Además, las ayudas destinadas a la zona son ignoradas y despreciadas por el ayuntamiento de Moncada, mientras que en pueblos cercanos se aprovechan para mejorar infraestructuras y gestionar plagas.
A pesar de los esfuerzos realizados por los agricultores para formar un consejo agrario, el mismo ha sido disuelto y no se ha convocado desde 2013. Aunque se han transmitido las carencias y el abandono que sufren a las autoridades locales, el progreso ha sido mínimo debido a la falta de voluntad política y dedicación por parte del concejal de agricultura.
La llegada de un nuevo equipo de gobierno y promesas de cambios no ha mejorado la situación. Los agricultores siguen esperando medidas concretas, como la recogida de entregas en Conselleria para prevenir plagas y la instalación de hidrantes, prometidos desde la legislatura anterior.
Los agricultores exigen dedicación e implicación por parte del gobierno, así como un consejo agrario activo que atienda sus necesidades. Quieren preservar el paisaje, la cultura y la identidad de Moncada, manteniendo sus campos y tradiciones agrícolas. El apoyo incondicional prometido por Compromís también es esperado con ansias por los agricultores.
Ante la situación actual, los agricultores hacen un llamado a la alcaldesa Amparo Orts, al concejal de agricultura Enrique Ruiz y al nuevo socio de gobierno, Compromís, para que actúen con dedicación y amor a su pueblo, brindando el apoyo necesario para salvar el campo y mantener la esencia de Moncada.
