El pasado 15 de marzo, el Juzgado de instrucción 1 de Paterna abrió diligencias tras la comparecencia de parte del equipo de arqueólogos ArqueoAntro que trabajan en la exhumación de la fosa 22 del cementerio de la localidad para dar cuenta del hallazgo de restos óseos. Aunque la jueza requirió al Instituto de Medicina Legal el día siguiente que datara la antigüedad de los restos, a día de hoy aún no se ha producido la visita del forense especialista por lo que el equipo de arqueólogos mantiene paralizados los trabajos.
La apertura de diligencias, señalan desde el TSJ, pretende averiguar la data de los restos humanos hallados porque, si la antigüedad es inferior a 20 años, los hechos no estarían prescritos y habría que abrir una investigación para determinar si guardan relación con la
comisión de algún delito y tratar de identificar a los posibles autores.Las citadas fuentes explican que el mismo día 15 de marzo, el Juzgado pidió al forense que se desplazara al cementerio. Al día siguiente, 16 de marzo, el juzgado volvió a oficiar al Instituto de Medicina Legal para que datara la antigüedad de los restos óseos hallados.
El Juzgado ha reiterado esta petición tres veces más, los días 20, 23 y 26 de marzo. Concretamente el día 26, ayer, ofició al Instituto de Medicina legal para que "a la mayor brevedad y con carácter urgente se persone en el cementerio de Paterna para dar debido cumplimiento a los oficios remitidos desde este Juzgado los días 16, 20 y 23 de marzo por los que se les solicitaba que informaran a este Juzgado si los cuerpos descubiertos en la fosa común del Cementerio de Paterna tienen una antigüedad inferior o superior a 20 años".
