El Ayuntamiento de Torrent ha instalado 600 sensores que miden la calidad del aire, la contaminación acústica y ambiental e, incluso, indican el número de plazas libres de aparcamiento, convirtiendo a la ciudad en un espacio más moderno, seguro para vivir y eficiente en sus servicios.
Los sensores están situados en farolas que se encuentran en puntos estratégicos y que registran un mayor tráfico, como es la plaza Obispo Benlloch (puerta del consistorio) o la avenida al Vedat, que serán los encargados de medir el ruido y la contaminación acústica.
Por otro lado, también se han instalado en las zonas del Hort de Trénor y Parc Central, que calcularán la temperatura y la humedad, con el objetivo de controlar y economizar en el consumo de agua.
Al mismo tiempo, la red de sensores también obtiene los índices de contaminación ambiental del municipio. Por este motivo se han instalado sensores de aire y de partículas, que están conectados a un programa que ofrece todos los datos y que pueden consultarse en la web municipal en el apartado “Indicadores Ambientales”, o a través del siguiente enlace http://bit.ly/2ZoNhi8.
De esta manera, los torrentinos pueden diseñar sus rutas más saludables, teniendo en cuenta la contaminación y las propiedades del aire en cada momento del día.
El proyecto se aplica, además, a la recogida de residuos, puesto que alrededor de 300 contenedores de basura ya han sido sensorizados, con lo que se puede vigilar si están llenos o, incluso, la temperatura que tienen, un dato que alertará de un posible incendio.
Por último, para controlar el buen uso de las plazas de aparcamiento se ha instalado una red de dispositivos de sensorización en más de 100 emplazamientos, que favorecerá el estacionamiento de las personas con movilidad reducida, así como a los vehículos de descarga de mercancías.
