Con motivo de la declaración del Estado de Alarma decretado por el Gobierno el pasado día 14 de marzo y al objeto de evitar los desplazamientos no justificados de las personas, y sobre todo los desplazamientos a segundas residencias durante la Semana Santa, el sector de Tráfico de la Guardia Civil ha montado más de ciento cincuenta controles diarios que se efectúan en toda la red de carreteras interurbanas de la Comunitat.
El pasado día 9 de abril, a las 9:00 horas, efectuando uno de los citados controles en el kilómetro 351,700 de la autovía A-3, en el término municipal de Mislata, a un kilómetro escaso de la ciudad de València, efectivos de la Agrupación de Tráfico interceptaron la presencia de un taxi con un cliente en el asiento trasero. Al no acreditar el pasajero los motivos del viaje y ante el intenso olor a marihuana que desprendía el interior del vehículo, los agentes procedieron a inspeccionar el maletero por si pudiera transportar algún tipo de drogas y pudiera realizar un traslado a una segunda residencia. En el interior del maletero hallaron dos cajas que contenían cogollos de marihuana, que tras un posterior pesaje arrojaron un peso de 3,7 kg.
El taxista manifestó a los agentes de la Guardia Civil que el servicio le había sido solicitado por teléfono y que lo había recogido en Mislata para desplazarse hasta el barrio del Cristo de Aldaia y regreso. Aseguró también que era la primera vez que el usuario le había requerido sus servicios, desconociendo lo que trasladaba toda vez que fue el propio usuario quien directamente introdujo una caja en el interior del maletero, portando la otra consigo en el asiento trasero. El taxista aseguró finalmente no poder detectar el olor a marihuana porque al llevar la mascarilla puesta le impedía percibir el olor.
Por todo ello se procedió a la detención del ocupante del taxi, de 32 años de edad y nacionalidad española, por un supuesto delito contra la salud pública. La sustancia incautada se entregó en la Sección de Farmacia de Sanidad y Política Social de Valencia. Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Torrente.
