Este miércoles por la mañana, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha visitado València para presentar junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, un plan de medidas de acción inmediata para mitigar la problemática sobre el servicio de Cercanías de Renfe que ha sido puesto de relieve por el ejecutivo valenciano.
La ministra no ha podido sino reconocer el descenso en la calidad de este servicio que ha provocado las quejas y el consiguiente descenso del número de usuarios, si bien ha argumentado que este hecho se debe a la falta de inversión de la legislatura anterior, que no ha podido ser cubierta en los dos años de la presente pese a haber destinado 850 millones a tal fin lo que, en definitiva, ha derivado en el aumento de las incidencias en la red.
Y es en este punto en particular en el que la ministra se ha detenido para comunicar la evolución de los trabajos que se están desarrollando con motivo del robo de cable de cobre y posterior incendio en la estación de Massalfassar que alteró muy seriamente al tráfico ferroviario entre València y Castelló.
En este sentido, la responsable del Mitma ha comunicado el avance de los trabajos de recuperación del centro de transformación de Massalfassar y que a finales de este mes se podrán recuperar el 90% de las frecuencias de servicio afectadas.
Al encuentro también ha asistido el conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, y el presidente de Renfe, Isaías Taboas, entre otros.
A finales de enero dice. Ni en sus mejores sueños.