Un verano más se ha puesto en marcha el programa Vacances en Pau, que pone en contacto a un gran número de familias valencianas, dispuestas a acoger a niñas y niños saharauis, con sus familias en el Sahara y permite así que durante los meses estivales, en los que las temperaturas en los campamentos son extremas, puedan ser acogidos temporalmente en el seno de estas familias valencianas.
La concejala de Cooperación al Desarrollo y Migración, Maite Ibáñez, junto a representantes de la ONGD Al.Adala y el subdelegado provincial de la Delegación Saharaui para la Comunidad Valenciana, Mohamed Fadel, ha participado este viernes en la recepción de las niñas y niños saharauis del programa 'Vacances en Pau' que ha tenido lugar en el Salón de Cristal del Ayuntamiento de València. También ha estado presente Mohamed Saleh Zerouali, fotógrafo y fixer de Equipe Media, acogido actualmente en el Programa Valenciano de Protección y Acogida Integral de Defensoras y Defensores de Derechos Humanos. Esta edición acogerá a un total de 30 niñas y niños en la provincia de València, 80 en toda la Comunidad Valenciana y un total de 2300 en todo el territorio español, lo que refleja el gran esfuerzo de las organizaciones que lo apoyan y la solidaridad de las familias valencianas y españolas en participar en este programa.
La concejala de Cooperación al Desarrollo y Migración, Maite Ibáñez, ha afirmado que para el Ayuntamiento de València es una “satisfacción recibir un año más al grupo de niños y niñas saharauis participantes en este programa, que han venido a disfrutar en València durante estos dos meses de descanso y atenciones”. “A través de este programa potenciamos la solidaridad de las familias y los lazos de interculturalidad con el pueblo saharaui. Asimismo, es una oportunidad de convivencia, de impulsar la educación en valores, que permite facilitar experiencias e intercambios”.
Este programa de acogida familiar temporal pone el énfasis en varias líneas de actuación: difundir la causa saharaui y evidenciar la situación de la población que vive en estos territorios; mejorar la salud de los niños y niñas mediante revisiones y diagnósticos previos y proporcionarles una nutrición equilibrada durante su estancia estival, y establecer lazos de unión entre familias acogedoras valencianas y familias saharauis.
El programa sufrió una interrupción durante los años 2020 y 2021 como consecuencia de la pandemia y por la necesidad de establecer medidas preventivas para garantizar la seguridad sanitaria. En estas dos ediciones, el apoyo económico realizado por el Ayuntamiento de València a través de la concejalía de Cooperación al Desarrollo y Migración, se reorientó hacia actuaciones en materia de Acción Humanitaria y con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de la población infantil refugiada saharaui, entregando a las familias alimentos, material escolar y sanitario.
