La portavoz del Grupo Municipal Popular, María José Catalá, ha calificado de “alarmantes” las cifras conocidas hoy del paro en la ciudad de Valencia. Al respecto, ha lamentado, “no vemos en el gobierno de Ribó y el PSPV un cambio en sus políticas económicas que pudiera generar nuevas expectativas para los inversores y un alivio de la carga fiscal a comercios y empresas para evitar cierres y mantener los puestos de trabajo”.
3.008 vecinos de Valencia personas se han ido al paro en junio, alcanzado ya los 67.759 parados en la ciudad, un 4,68 más que en mayo y un 27,83% más respecto a las cifras de enero. Catalá ha señalado que la evolución interanual en la ciudad de Valencia “es alarmante (28,86%)".
El crecimiento del paro en junio en Valencia ciudad (4,68%) está por encima de lo que crece en las otras capitales de la Comunitat Valenciana. Crece más que en Alicante (3,74%) y que en Castellón (3,02%). El crecimiento está por encima, además, de la media nacional y de la Comunitat Valenciana.
Catalá ha apuntado a la falta de iniciativa del gobierno de Ribó y el PSPV que Valencia lidere el paro. “Estamos viendo como ciudades que tienen una importante dependencia del sector servicios y turístico, como es el caso de Alicante, están logrando reducir la crecida del paro, mientras que Valencia sigue siendo la ciudad líder de paro cuando debería ser el principal motor de la economía de la Comunitat”.
Catalá ha reiterado “la importancia” de que Valencia esté preparada y sea competitiva una vez se supere la crisis sanitaria”. Para ello, ha insistido en “la necesidad de aumentar los incentivos para los inversores y emprendedores bajando la presión fiscal de la ciudad”.
La subida de tasa e impuestos aplicada por el gobierno municipal, ha recordado “en 2020 va a sacar de los bolsillos de los valencianos 30 millones euros más que el año pasado”. En este sentido, ha recordado que “en 2015 cada valencianos pagaba al año 532€ de media, mientras que ahora tiene que pagar 638 €, lo que supone un incremento de más de 100€ de la presión fiscal que soportamos”.
Igualmente, ha vuelto a reclamar más medidas de apoyo al comercio y al sector de la hostelería y una reducción de la presión fiscal que soportan. En 2020 estos sectores económicos están afrontado subidas del IBI de hasta el 13% y de la tasa del agua y el alcantarillado de más del 100%.
Catalá ha reiterado que “la mejor política social que puede hacer un Ayuntamiento es la de fomentar la creación de empleo”. Por ello, ha señalado para concluir que “es prioritario reorientar el mayor número de recursos municipales a la reactivación de la economía y generar nuevos puestos de trabajo”.
