El ayuntamiento de Albal, a través de la empresa CENTREVERD S.A, responsable del cuidado de parques y jardines en la localidad, ha procedido a la tala de uno de los emblemáticos pinos que, desde hace casi un siglo, adornaban la Plaza del Jardí, punto neurálgico de la vida social, comercial y cultural de la comunidad.
En base a las conclusiones de Nuria Calero, ingeniera agrónoma a cargo del Análisis del estado fitosanitario y estructural del arbolado en la Plaza del Jardí de Albal, se ha determinado que las raíces del pino habían sufrido daños debido a las obras de remodelación de la plaza llevadas a cabo el año pasado, lo que resultó en un estado irreversible de desecación.
La renovación de la plaza implicó la pavimentación y la incorporación de nuevas jardineras que integraron los ejemplares de Pinnus halepensis originalmente plantados en la plaza. Sin embargo, esta transformación impactó negativamente en el paquete radicular de los árboles, combinado con las extremas temperaturas de este verano, debilitando su estado fitosanitario.
Aparición de hongos
Un síntoma evidente de este impacto es la aparición de hongos que afectan el sistema vascular de los árboles y provocan la caída de las acículas (pinochas), posiblemente como consecuencia del debilitamiento de las raíces. Se llevaron a cabo medidas para mitigar estos efectos, como añadir tierra vegetal a las nuevas jardineras, instalar un sistema de riego por goteo y realizar tratamientos antifúngicos, pero lamentablemente, uno de los ejemplares más afectados tuvo que ser talado por representar un riesgo para los ciudadanos, ya que se encontraba en una zona de tránsito constante y cerca de una zona de juegos infantiles.
El edil de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Cambio Climático, Joan Carles Puchalt, argumenta que "nos percatamos de que el estado de los pinos dela plaza no era bueno y tras consultar con expertos externos y con ‘Centre Verd’, la encargada del mantenimiento de parques y jardines del municipio, iniciamos un tratamiento que parece haber funcionado con todos los ejemplares excepto con uno”. El concejal apunta que “este pino no ha superado las reformas de la plaza del Jardí llevadas a cabo por el anterior gobierno” y comenta que el actual gobierno quiere hacer de Albal un pueblo verde, con mejor paisajismo y ante todo no perder especímenes tan antiguos”.
El consistorio es consciente de la significancia de esta decisión para los residentes, dado que estos pinos forman parte de la memoria colectiva de muchos. Sin embargo, la salud del árbol es prioritaria y su estado podría poner en riesgo su integridad estructural o la de sus ramas, como sucedió recientemente en el barrio del Raval en Barcelona, donde la fractura de una palmera resultó en una tragedia. El alcalde de Albal, José Miguel Ferris, enfatizó la importancia de la planificación y la precaución en proyectos urbanísticos para evitar incidentes similares y las consecuencias negativas que pueden acarrear para el municipio y sus habitantes.
