La Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Torrent ha apostado desde el inicio de la legislatura por el transporte público y la movilidad sostenible. Por ello, ha acometido varias iniciativas que han permitido incrementar cada año los usuarios tanto de TorrentBus como de TorrentBici pero, ahora, según el edil responsable, José Antonio Castillejo, el Consistorio sube la apuesta y ofrece el servicio de alquiler de bicicletas -que es compatible con el del área metropolitana y el de València- a todos aquellos vecinos que tengan un abono de TorrentBus.
Un incremento que el concejal ha achacado, en el caso del servicio de bicicletas, a la apuesta por mejorar las infraestructuras viarias, con más carriles bici y ciclocalles, y la renovación de las bicis y, en el caso del autobús, a la profunda reordenación de los itinerarios respondiendo a las necesidades de los ciudadanos y a la recuperación de la gratuidad del servicio para los estudiantes, pensionistas, desempleados y personas con movilidad reducida.
En ese sentido, Castillejo ha anunciado otra novedad para este 2018 encaminada a mejorar la movilidad de otro colectivo: las personas con discapacidad intelectual. La intención es que estas personas también disfruten de la gratuidad del servicio de autobús por lo que el equipo de Gobierno llevará la modificación del reglamento al pleno municipal donde espera recibir el “apoyo unánime” de los grupos municipales a esta propuesta.
Componente social
El alcalde del municipio, Jesús Ros, que también ha comparecido ante los medios junto a Castillejo, ha defendido el componente social de las políticas de movilidad aplicadas por el Consistorio torrentino y ha recordado cuando se criticó el recuperar la gratuidad del autobús para ciertos colectivos. “Algunos dijeron que así nadie pagaría el autobús pero los datos de 2017 demuestran que se han realizado 20.000 viajes pagados en la línea 1, más de 15.000 en la línea 2, algo más de 30.000 en la línea 3 y cerca de 80.000 viajes pagados en la línea 170”, ha relatado.
En ese sentido, y siguiendo con la política de mejorar la calidad de vida de los vecinos y no “hacer rentable económicamente un servicio público”, Ros ha propuesto iniciar una campaña de promoción del abono de diez viajes “que sale algo más barato”.
