La iluminación de la avenida Germanías reducirá su intensidad en las horas de menor tráfico

Se han iniciado las obras de mejora de la eficiencia energética en la Avenida Germanías y en las calles adyacentes de Moncada, una actuación que se enmarca en el Plan Confianza de la Generalitat y cuyo presupuesto asciende a más de 190.000 euros.
Con estas intervenciones se pretende mejorar las instalaciones del alumbrado público para que durante las horas de mayor tránsito de peatones y vehículos la iluminación sea óptima y acorde a las necesidades de los usuarios. De igual modo, cuando el tráfico disminuye, normalmente en horas nocturnas, se reducirá el nivel de iluminación en las instalaciones, obteniendo así un ahorro considerable en el consumo.

Entre otras de las actuaciones, también se ha previsto sustituir los cuadros eléctricos ubicados en diversas zonas del término municipal, por otros que incluyen un reductor de flujo para el ahorro nocturno, cabe destacar que algunos de estos cuadros se sitúan en polígonos industriales, y también en calles principales de la ciudad. En este sentido, y según ha comentado el alcalde, Juan José Medina, “las sustituciones que se van a llevar a cabo abarcan prácticamente todo el término municipal, con lo que el ahorro en consumo será mayor”.

Además, se procederá al cambio de las luminarias existentes en edificios tan emblemáticos como la Casa Comuna de la Real Acequia de Moncada, también en la calle Acequiero Carbonell, calle Rey Don Jaime y parte de la calle Barreres. Por su parte Medina ha destacado que con estas actuaciones “se reducirá el consumo, además de mejorar la eficiencia energética y se renovarán algunos elementos obsoletos del alumbrado público existente”.

Dentro del programa de actuaciones previstas también se sustituirán las farolas de la avenida Germanías por luminarias clásicas, “acordes con el entorno cultural y arquitectónico”.

Las obras en materia de ahorro energético que se llevaron a cabo hace un año en los alrededores del Mercat Vell, enmarcadas también en el Plan Confianza y con un presupuesto de 110.000 euros, permitieron mejorar la eficiencia energética instalando un reductor de flujo centralizado para bajar el consumo, además de soterrar el cableado que anteriormente quedaba a la vista.