La Asociación de Vecinos de Benimaclet ha denunciado el intento del equipo de Gobierno municipal de realizar una modificación puntual del PGOU que tiene por objeto la reclasificación, de urbano para uso industrial a urbano para uso residencial comunitario, del solar situado en la calle Alquería de Serra número 131, junto al cementerio parroquial del barrio.
El expediente, según fuentes vecinales. entró en la Generalitat el próximo pasado mas de noviembre "y parece que está superando sin mayores dificultades todos los trámites necesarios para satisfacer los intereses especulativos de los actuales propietarios del terreno. La información puede consultarse en la web de la Generalitat.
El AVV considera este hecho "gravísimo" puesto que ignora la propuesta que realizó 'Benimaclet és Futur', un documento fruto de un proceso participativo promovido por el mismo Ayuntamiento -y aprobado, paradójicamente sin ningún voto en contra, por el Pleno Municipal celebrado el 26 de abril del 2018-, en el cual se propone que la parcela en cuestión pase a ser catalogada como suelo no urbanizable protegido.
La Asociación de Vecinos de Benimaclet ha recorado que este no es el primer intento del ayuntamiento de Valencia de retirar la actual catalogación a la parcela de la antigua fábrica de la central lechera El Prado. Ya en el 2007 el gobierno municipal de aquel momento hizo un intento de modificar el PGOU de 1988 y recalificar el triángulo comprendido entre el Camino de Farinós, autovía de Cataluña, y cementerio parroquial, de no urbanizable a urbanizable. La asociación vecinal presentó alegaciones, recogió firmas, y realizó concentraciones y logró paralizar el proyecto dejando este espacio como suelo industrial.
Paco Guardeño, portavoz vecinal, ha explicado que la catalogación de la parcela como urbana de uso industrial en el PGOU de 1988 "fue un grave error. Dado que es una isla en medio de terrenos clasificados como suelo no urbanizable protegido y junto a la Alquería de Serra y el cementerio (ambos Bienes de Relevancia Local (BRL)), "la opción más lógica habría estado dejarla fuera de ordenación; así volvería a ser agrícola una vez cesada la actividad. Esta opción era la única compatible con la protección del paisaje de l'Horta Norte. Cualquier construcción en esa zona provoca un importantísimo impacto visual".
Guardeño ha explicado que desde la clausura de la central lechera se han sucedido los intentos especulativos de modificar el uso industrial. Así ocurrió en 2010 con el proyecto de Revisión Simplificada del PGOU, según el cual estos terrenos pasaban a ser considerados de uso terciario, "aunque lo más irritante del nuevo intento es que, como coartada, se incluye la rehabilitación de la Alquería de Serra, que acontecería oficinas de la residencia de estudiantes y centro de exposiciones y de interpretación de l'Horta".
Por todo ello y en estas circunstancias, la AVV Benimaclet continúa pidiendo la no construcción de cualquier tipo de edificación en estos terrenos. Guardeño explicó que "si el intento del 2010, con un Consistorio menos sensible a las demandas vecinales, pudo ser parado por la ciudadanía, la AVV de Benimaclet hará todo el que esté en sus manos para evitar que en esta nueva ocasión el capital especulativo acabe ganando la partida".
