La empresa Incusa, con sede en Silla, prepara una partida de 3.000 metros cuadrados de pieles que viajarán a mediados de mayo desde esta localidad valenciana hasta Sarrebourg, donde está la sede de la empresa de origen francés Mephisto. En total, tienen previsto enviar a lo largo de este año 30 toneladas para la fabricación de los zapatos de esta multinacional.
Las pieles son de vacuno y se trabajan de manera artesanal en la fábrica de Silla. Se envían varios tipos de pieles (crispadas -con relieve-, lisas o graneadas) tintadas de varios colores –fundamentalmente clásicos- cuyo destino es la fabricación de zapatos artesanales, principalmente para caballero.
La fábrica de Incusa, de larga tradición en el sector del calzado, lleva más de 20 años exportando pieles a Francia para la marca Mephisto. Esta multinacional del calzado de origen francés es símbolo de calidad, diseño y confort y esos mismos valores son los que transmite a Incusa como proveedor europeo de pieles. Por ello, un grupo de inspectores procedentes de Francia viajará a Silla para garantizar que cada metro de piel destinado a la fabricación de sus zapatos sea acorde a los niveles de calidad de la marca.
El cariño en las pieles
La filosofía de Mephisto en relación a las pieles es que hay que trabajarlas con cariño desde el origen. Si el ganadero trata bien su ganado, la firma podrá dar continuidad a ese buen trato en el proceso de producción del calzado con pieles bien cuidadas. El resultado son pieles que han recibido un trato exquisito en origen, sin mellas ni defectos.
Una vez los inspectores de la firma francesa hayan garantizado que todo es correcto, Incusa enviará una partida de pieles de 3.000 metros cuadrados a Sarrebourg, donde está la sede central. Estas pieles servirán para la fabricación de calzado que posteriormente se venderá por todo el mundo, siendo los mercados de mayor éxito EEUU, Canadá, Japón y centro Europa.
Mephisto comercializa 600 modelos diferentes por temporada para 2.400 estilos. La firma tiene más de 872 Mephisto Shop repartidas por todo el mundo y cuenta con 2.800 empleados que fabrican entre 20.000 y 28.000 pares de zapatos diarios lo que supone al final de año una facturación de 240 millones de euros.
