El portavoz socialista en la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi), Ramón Marí, ha asegurado hoy que no se puede pagar menos en el recibo del agua "porque hay que cubrir el agujero que han dejado en Emarsa su presidente, Enrique Crespo, y su gerente, Esteban Cuesta".
N un comunicado, Marí ha explicado que el precio del agua "ha sufrido una escalada sin precedentes en los últimos años y no deja de subir pese a que el precio al que la suministra la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) sea ahora un 66 por ciento más barato que hace tres años".
En este sentido, ha lamentado que Crespo intente "engañar" a los vecinos "vendiendo como un éxito de su gestión que se congele para 2011 la tarifa", cuando "en realidad" el tramo que cobra la entidad metropolitana "se incrementa y la cifra global se mantiene porque desciende el tramo que ingresa la CHJ".
Por ello, Marí ha afirmado que las "mentiras que intenta colar Crespo caen una tras otra" y ha recordado que el déficit de Emarsa asciende a 8, 4 millones de euros, "cantidad a la que hay que sumar los 8 millones de euros del préstamo que se firmó en 2007 y cuya amortización se empezará a pagar en 2012"
"A estos 16, 4 millones de euros hay que sumar otros 24, 2 millones que reclama una de las empresas suministradoras por incumplimiento de contrato, lo que situaría a la Emshi ante una situación real de 40, 6 millones de euros negativos", ha apuntado.
El socialista ha recordado que, aunque la Emshi "ha anunciado que este año no va a subir el recibo, en realidad reconoce que lo hará en 2012 porque tendrá que hacer frente a las amortizaciones de los dos préstamos", de manera que lo "único" que hace el PP es "aplazar el pago y engañar a la población".
Por otra parte, ha denunciado que Emarsa "gastó 40 millones de euros más en gastos corrientes desde 2004 a 2009", según un estudio realizado por los socialistas, una cifra que se corresponde a su juicio "con la administración fraudulenta durante la etapa en de Crespo como presidente".
Además, ha explicado que, mientras los gastos corrientes de la depuradora se han incrementado "de forma desmesurada", el trabajo en la planta de Pinedo "ha descendido por el menor consumo de agua que se realiza en tiempos de crisis".
"En ningún caso este crecimiento podría estar justificado si no fuera por las irregularidades cometidas y ahora investigadas por Fiscalía y el Tribunal de Cuentas a instancias del grupo socialista", ha aseverado.
