El Ayuntamiento de Valencia ha tenido que tomar medidas para proteger parte de su patrimonio histórico como la Lonja o las Torres de Serranos tras haberse constatado días atrás que algunos indeseables habían cometido actos incívicos contra algunos de ellos en estos días previos a la semana grande de las Fallas.
Los compañeros del diario Levante ponían de relieve días atrás que una parte de la fachada de la iglesia de los Santos Juanes se había convertido en un auténtico 'urinario público' por la acción de algunos transeúntes.
La combinación fiesta de calle + bebidas alcohólicas crean el cóctel perfecto para la aparición de este tipo de actos incívicos y más durante la celebración de eventos multitudinarios como las Fallas, que convierten por su propia idiosincrasia el centro de la ciudad en una gran fiesta constante.
Por ello, antes del comienzo efectivo de la semana fallera con la plantà infantil, el consistorio ha comenzado a proteger y perimetrar sus monumentos más emblemáticos y la Lonja y las Torres de Serranos han sido los primeros para mantenernos a salvo en la medida de lo posible de estas agresiones al patrimonio histórico y cultural de Valencia.
En cualquier caso, la mejor de las medidas para cuidar del patrimonio de todos los valencianos es, claro está, la educación.
