Fruto de un proceso participativo de dos años, la asamblea vecinal Cuidem Benimaclet ha elaborado una alternativa al antiguo Programa de Actuación Integrada (PAI) de Benimaclet-Este, que ha difundido mediante un vídeo difundido en varias plataformas bajo el lema 'El barrio que luchamos, el barrio que labramos'.
La propuesta, resumida ahora en formato audiovisual para, según apuntan desde Cuidem, "facilitar su difusión, ya que, por el momento, la propuesta se había difundido mediante un dossier que, por su forma y contenido, no es accesible para parte del vecindario de Benimaclet".
Con él, Cuidem Benimaclet reivindica que "en 30 años se han recuperado más de 40.000 metros cuadrados correspondientes a los terrenos que en producción fueron convertidos en descampados y vertederos en la década de los 90". Más de 500 huertos, espacios verdes para las escuelas y las crías, 7.500 metros cuadrados de jardines con más de 100 árboles plantados, centros sociales, como el CSOA l’Horta, e incluso aparcamientos comunitarios con la capacidad de 300 automóviles; son algunos de los ejemplos citados por el colectivo.
También aseguran que "hay que hacer memoria de todo lo que ha ocurrido en los antiguos terrenos del PAI – apuntan desde Cuidem Benimaclet – tanto en lo que se refiere al abandono y degradación a la que han sometido los terrenos empresas e instituciones, como las tareas de redignificación y reapropiación por parte de las vecinas de parte de la milenaria huerta de Benimaclet que todavía resiste a este lado de la Ronda Norte".
Una gran riqueza en biodiversidad en la zona
Su valor social y antropológico, así como su valor como pulmón verde natural, son algunos de los argumentos de la asamblea vecinal frente a la defensa de un espacio que "cumple la función de estabilizar las temperaturas y cuenta con una gran riqueza en biodiversidad documentada, como una treintena de especies de aves, gran variedad de insectos polinizadores y plantas de origen agrario, salidas de manera espontánea o procedentes de jardines".
Además destacan que "en un contexto de emergencia climática, este paisaje periurbano es el único capaz de alcanzar realmente una transición orgánica entre la ciudad y la huerta de Valencia". Aun así, recuerdan desde Cuidem Benimaclet que "hay que seguir trabajando y cuidando tanto esta parte como el resto del barrio, es por eso que consideramos que se puede llevar a cabo una alterativa en el antiguo PAI respetando el trabajo realizado por las vecinas durante los últimos años, que pase por no construir más edificios, sino espacios multifuncionales abiertos e inclusivos".
