Con el apogeo de las fiestas mayores, llega una de las citas más esperadas: el LII concurso internacional de allipebre de Catarroja. Este certamen, con más de cincuenta años de historia y declarado fiesta de interés turístico autonómico, consiste en la preparación del guiso con anguilas y patatas, tal como solían hacerlo antiguamente los pescadores de la Albufera.
El concurso reúne miles de personas anualmente en el Port que buscan degustar el famoso plato catarrogí, que ya es todo un hito en la gastronomía valenciana, y en este espacio natural emblemático para la ciudad. Desde el ayuntamiento se cocinan y se proporcionan 3.000 raciones de degustación para los visitantes.
La alcaldesa, Lorena Silvent, indica que "el concurso de allipebre es un evento que reúne, reproduce y pone en valor las costumbres de Catarroja en un entorno tan esencial como es nuestro Port. Es importante mantenerlas y seguir con este tipo de tradiciones que escriben diariamente la historia de nuestra ciudad".
Desde el Ayuntamiento de Catarroja se proporciona a los participantes los ingredientes y la leña necesarios para cocinar. Una vez cocinados, los platos serán juzgados por un tribunal de especialistas y pescadores locales que se reunirán para degustar el plato y repartir los premios entre los vecinos y vecinas que hayan participado. El primer premio es de una cuantía de 600 euros, el segundo de 400 euros y un tercero de 200 euros.
El concurso internacional de allipebre dará paso al día siguiente a otra cita emblemática para Catarroja. La festa de la sega celebrará su XI edición y volverá a convertir al Port en un espacio donde se dan a conocer las tradiciones y donde se ponen en valor las costumbres del pueblo.
