Los vecinos de Catarroja cuentan desde ayer con farmacia de guardia en la localidad que evitará que tengan que desplazarse a otros municipios ante cualquier urgencia. Las guardias se realizarán en turnos rotatorios entre las nueve farmacias del municipio.
Lograr esta reivindicación histórica, no ha sido fácil, como explica el propio alcalde del municipio, Francisco Chirivella. "Ha sido fruto de numerosas conversaciones hasta que hemos logrado la colaboración de los farmacéuticos. De hecho, serán las nueve farmacias de la localidad quienes asuman el coste derivado del servicio de urgencia".
No obstante, Chirivella ha explicado que el servicio de guardia "era necesario debido al crecimiento que ha experimentado la localidad en los últimos años".
Desde hace dos años, el Ayuntamiento venia solicitando formalmente al colegio de farmacéuticos una farmacia de guardia para Catarroja, debido a que desde hace años compartían farmacia de guardia siete municipios y más de 115.000 personas; Catarroja, Massanassa, Albal, Benetússer, Lloc Nou de la Corona, Alfafar y Sedaví.
Esto suponía que los vecinos tuvieran que desplazarse hasta estos municipios con sus propios medios, o en taxis, a veces a altas horas de la madrugada, sin conocer la ubicación exacta de estas farmacias.
Catarroja cuenta en la actualidad con más de cerca de 29.000 habitantes, y dispone de nueve establecimientos farmacéuticos para una superficie de casi tres millones de metros cuadrados.
Desde el pasado mes de octubre, la guardia se amplió con un servicio de urgencia hasta las doce de la noche de lunes a sábado y el domingo hasta las dos del mediodía, hasta completarse hoy con las 24 horas, con el fin de no interferir el orden de guardias del servicio mancomunado.
El acuerdo con los farmacéuticos no queda ahí ya que además colaborarán con el consistorio para impartir charlas sobre sanidad en los centros escolares del municipio, promocionando la vida saludable en problemas que afectan a la población infantil como la obesidad.
