El pasado 28 de diciembre, el pleno del Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell aprobó el presupuesto municipal para el 2016 con un montante de 2.266.912, 89 euros con los votos a favor de los miembros del equipo de Gobierno, PSPV-PSOE y Compromis, y la abstención del Partido Popular.
En este presupuesto “se da un giro social y claramente se apuesta por poner más recursos del Ayuntamiento al servicio de las personas que más lo necesitan del municipio”. Es un fin que se marcó desde el primer momento el equipo de Gobierno: “las personas son la prioridad y trabajaremos por mejorar la vida a nuestros vecinos”.
Además, en las cuentas de 2016 se habilita una gran partida extraordinaria de ayudas sociales en aras de ayudar a las personas que peor lo están pasando además de incluir una “apuesta fuerte” por una importante remodelación de los servicios sociales dándoles la dimensión que necesita Bonrepòs i Mirambell.
“Este punto es de vital importancia y se tendría que haber acometido años atrás, cuando más intensa fue la crisis que seguimos padeciendo”, han explicado desde el Gobierno municipal, que ha reconocido que “después, de solicitar colaboración al partido popular, para que aportaran sus propuestas a incluir en el presupuesto, las hemos estudiado y hemos asumido casi todas las propuestas, a falta de un mejor estudio de la única no incluida”.
“Apostamos por potenciar la mancomunidad del Carraixet, minorada estos últimos años, dado que el compartir los costes mancomunando servicios es apostar por mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos. Queremos poner en marcha el primer presupuesto participativo real, en donde los vecinos decidan un gran parte de las inversiones que el Ayuntamiento va a realizar, con unos criterios claros y razonables”, ha comentado el alcalde, Rubén Rodríguez.
