El alcalde de Albal, Ramón Marí se puso en contacto con la delegada del gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero. Una conversación que ha servido para abordar el problema de los robos que se están produciendo desde hace unos tres meses en la Urbanización Santa Anna, ubicada en la periferia de la localidad de l’Horta Sur.
Son ocho las viviendas que han sufrido los robos en tres meses, unos hechos que, ''como no podía ser de otra manera'', mantienen preocupados al vecindario, han esgrimido en un comunicado desde el consistorio.
La semana pasada Ramón Marí reunió de urgencia en las dos asociaciones del barrio residencial para poner en común estos hechos. Desde pasado 15 de mayo, el municipio ha reforzado la vigilancia y patrullajes a través de la policía local, ha pedido colaboración a la Guardia Civil, e instalará cámaras de video vigilancia. Además, ha cerrado uno de los accesos a la urbanización por perimetrar las entradas y salidas.
A la espera de una nueva reunión para coordinar acciones
A pesar de los controles durante toda la semana, de día y por la noche, este fin de semana han habido dos nuevos robos, un hecho que ya ha sido trasladado por banda del primer edil a la Delegación de Gobierno.
Durante la Junta de Gobierno celebrada esta semana, alcalde y miembros de la corporación abordaron el problema. Con todo, desde el Ejecutivo esperan una reunión esta vez con el Subdelegado de Gobierno, Luis Felipe Martínez, para tratar de coordinar más actuaciones que atajen el problema.
En ese sentido, y en coordinación con las fuerzas de seguridad, desde el ayuntamiento de Albal están pidiendo la colaboración ciudadana para poner freno a estos hechos y capturar a los delincuentes. Al mismo tiempo que invitan a no fomentar la alarma social.
