En unos días conoceremos los próximos datos de las listas de espera de los hospitales públicos valencianos. No espero nada bueno, y lo normal será que empeoren los que ya conocemos de antes del verano y evidenciarán el fracaso del Gobierno de Ximo Puig y Mónica Oltra.
Por mucho que intenten manipular los datos y ocultar la verdad, la realidad es que su gestión es desastrosa. Papelones como los del conseller Soler de las dos últimas semanas buscando metáforas para los recortes para acabar por reconocerlos evidencian la situación del Botànic, superado e incapaz de dar respuesta a la gestión de recursos básicos para los ciudadanos.
En los Hospitales de gestión pública que dan servicio a las comarcas de l’Horta la situación antes del verano era la siguiente: el Hospital General tenía una lista de espera quirúrgica de 141 días, La Fe de 130 días, el Arnau de Vilanova de 97 días y el Doctor Peset de 75.
Más allá de la evidente incapacidad de las sucesivas conselleras que han pasado con el Gobierno del Botànic, encuentro a faltar un plan, una idea de cómo abordar esta situación. Puig y Oltra se escudan en lo de siempre, pero ya no cuela. Después de más de 4 años de gobierno, ya no. Asuman su responsabilidad, no llevan 3 meses en el gobierno, van a presentar sus quintos presupuestos autonómicos a Les Corts estos días, así que es momento de asumir que es suya y sólo suya la responsabilidad de tomar medidas.
La situación con las resonancias magnéticas y las listas de espera no es mejor. Los últimos datos hechos públicos por la Conselleria de Sanidad, un informe firmado por la propia Ana Barceló hace un mes, cifran en 8300 personas las que están en lista de espera de los hospitales de referencia de las comarcas de l’Horta para una resonancia magnética.
Sectarismo y veto sanitario
Pero la incompetencia va más allá, la sobrepasan y entran de lleno en el sectarismo y el veto sanitario, jugando con la salud de las personas.
No voy a entrar en la razón, porque no tengo datos suficientes, pero la realidad es que de los hospitales de referencia de l’Horta, el de Manises tiene el mejor dato de lista de espera de cirugía, 37 días. Que además es el mejor dato de la Comunitat Valenciana.
Pues de premio, el sectario Gobierno de Botànic les prohíbe llevar a cabo cirugías cardiacas desde hace más de un año, excepto aquellas que sean de urgencia. ¿Por qué? Ni una sola razón.
Y la repercusión es automática: cientos de pacientes derivados a otros hospitales que tienen una lista de espera del triple o cuádruple de días. Juegan con la salud de las personas y con el bienestar de sus familiares.
Pero la situación no acaba aquí. La ley ampara la libre elección del paciente sobre en qué hospital quiere recibir atención médica; pues fuera de un plumazo, se saltan la ley y así ocultan su nefasta gestión de un servicio público esencial.
La situación es grave. Incompetencia, sectarismo, vetos y sin hoja de ruta, sin políticas, sin soluciones para frenar el deterioro de nuestro sistema público sanitario: esto es el Botànic de Puig y Oltra.
[ Javier Montero | Diputado Provincial del Partido Popular | @javimonteroh ]