Diputación inyecta 16 millones para transformar los municipios en espacios más saludables, amables e inclusivos

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La Diputación reforzará su apuesta por la lucha contra el cambio climático con la puesta en marcha del Plan Reacciona que destinará en una primera fase 16 millones de euros para, en otras muchas más cosas, “evitar que se pierda la mitad del agua con la que podemos contar en la provincia”.

Presentación Plan REACCIONA Maria Josep Amigó y Dolors GimenoLa vicepresidenta de la Diputació y responsable del área de Medio Ambiente, Maria Josep Amigó, y la diputada de Movilidad Sostenible, Dolors Gimeno, han presentado la segunda edición de la estrategia Reacciona 2021, las ayudas del área de Medio Ambiente de la corporación provincial para acompañar a los ayuntamientos de la provincia de Valencia en la emergencia climática a través de la mitigación, la adaptación y la educación ambiental.

La intención de la Diputación es que este plan “sirva para dinamizar el tejido empresarial y a la vez transforman nuestros pueblos y ciudades en espacios más saludables, amables e inclusivos en un nuevo escenario climático”, según ha manifestado la vicepresidenta Maria Josep Amigó.

Dos fases y varias novedades

Esta segunda convocatoria del Reacciona cuenta con novedades respecto de la primera edición, y es que, como ha explicado la vicepresidenta Amigó “tendrá dos fases, la primera con seis líneas y una segunda fase que incluirá cuatro ayudas, tres de las cuales serán nuevas: la implantación de las acciones de los Planes Locales de Gestión de Residuos, la ejecución de proyectos de vías ciclopeatonales y la recuperación de espacios naturales”.

Amigó explicó que la apuesta por este tipo de proyectos es tan fuerte “es que las ayudas son prepagables, es decir, el 85% del importe de la adjudicación se abonará una vez se hayan baremado las solicitudes y publicado el acuerdo de concesión. El 15% restante se abonará cuando se justifique el gasto”, según Amigó.

Primera fase con 16 millones

Esta primera fase cuenta con 6 líneas de actuaciones. La primera tiene que ver con la reducción de las emisiones por lo que se apuesta por un modelo energético más eficiente y más justo con una subvención para la elaboración de certificaciones energéticas de edificios municipales dotada con 171.000 euros.

La segunda línea tiene por fin sustituir las energías fósiles por energías renovables con el impulso del autoconsumo energético a las equipaciones municipales con una inversión de un millón y medio de euros. En la baremación de esta subvención se puntúa, entre otras cosas, si el ayuntamiento ofrece a la ciudadanía bonificaciones fiscales del IBI y del ICIO por la instalación de placas solares. “Es decir, además de promover las renovables estamos beneficiando directamente a la ciudadanía y favorecemos que la gente sea la protagonista de la transición energética”, según Amigó.

La tercera línea, impulsada por la Delegación de Movilidad Sostenible, destinará 150.000 euros para la redacción de proyectos de vías ciclopeatonales de interés natural “para vertebrar el territorio y fomentar la movilidad saludable en bicicleta o a pie, sobre infraestructuras ya existentes pero en desuso, como es el caso de antiguos trazados de ferrocarril, caminos históricos, vías pecuarias, sendas o caminos en entornos ribereños y de dominio público. En general, su filosofía no es construir sino aprovechar lo ya construido para recuperar la conexión con la naturaleza”, según ha explicado la diputada responsable del área, Dolors Gimeno.

Estas ayudas de movilidad se complementan con la cuarta línea del Plan Reacciona que es la subvención para la redacción de PMUS, dotada con 650.000 euros. Los PMUS son instrumentos de participación ciudadana que ordenan las diferentes redes de movilidad situando en el centro de la planificación a las personas.

La quinta línea contempla 300.000 euros para la redacción de Planes Locales de Gestión de Residuos, una herramienta de diagnosis y de participación ciudadana que permitirá a los municipios lograr los objetivos fijados por el Plan Integral de Residuos autonómico.

La sexta línea es la que cuenta con un mayor presupuesto ya que se destinan cerca de 7 millones para mejorar las redes de abastecimiento de agua potable y de saneamiento con un gran abanico de actuaciones: desde obras de captación y distribución al telecontrol o la digitalización, la reposición de contadores, la construcción de sistemas de drenaje sostenible, las redes separativas o el diseño de filtros verdes.

Por último, la Diputación se impulsa la implantación del programa 50/50 en las escuelas públicas, con una dotación de 208.000 euros. El objetivo es sensibilizar y motivar un cambio de hábitos, no tan solo en los niños y las niñas, sino en las comunidades educativas al completo.

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