La Policía Nacional investiga a unos padres después de que su bebé, de cinco semanas, llegara a un hospital de València con lesiones craneales graves de los que dio parte el centro. Los progenitores fueron detenidos, prestaron declaración en sede policial y se les dejó en libertad a la espera de su citación judicial.
El Juzgado de Instrucción número 2 de Torrent ha recibido el atestado policial relativo al presunto maltrato y abrirá ahora una investigación para esclarecer lo sucedido, han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Fue el centro sanitario el que dio aviso a la Policía Nacional a finales del pasado mes de agosto de que había ingresado un bebé de apenas cinco semanas con lesiones de gran impacto en la cabeza que no serían fortuitas, han informado fuentes policiales. También presentaba una fractura en el omoplato.
En ese momento, agentes del Grume activaron el protocolo e iniciaron una investigación por si se hubieran producido posibles malos tratos de los padres hacia su hijo, que este miércoles recibió el alta.
Los progenitores fueron detenidos el pasado día 15 y, tras ser oídos en declaración en dependencias policiales, quedaron en libertad y tendrán que acudir al juzgado cuando sean requeridos.
Los padres, vecinos de un municipio de l'Horta, dieron varias explicaciones a la Policía sobre lo ocurrido. La madre, según la misma versión, señaló que el hermano mayor del bebé, de tres años, le había dado un cabezazo accidental al ir a abrazarlo y el padre atribuyó la fractura en el omoplato a un presunto golpe accidental con la puerta del coche.
Los forenses -según la misma información- creen que las lesiones intracraneales son compatibles con el síndrome del bebé zarandeado y, los daños en el omoplato, con dos golpes de alto impacto y no accidentales.