Comprar un motor de segunda mano para un coche puede ser un riesgo excesivo por asumir, o bien, tratarse de una de las decisiones más rentables e inteligentes que se puedan tomar para mejorar el rendimiento del coche. ¿Cómo lograr que lo último suceda? En parte, siguiendo buenos consejos.
Y el primer consejo es tener un contexto claro de lo que significa comprar un motor completo para el coche, y entender que la compra de un motor de segunda mano no necesariamente significa que sea un motor de peor calidad, sino que sencillamente será más barato y requerirá algo más de análisis para tomar una decisión adecuada.
Empresas o plataformas confiables
En primer lugar, conviene evitar las páginas de compraventa entre particulares. No porque no se puedan obtener buenos motores de segunda mano y a precios increíbles, sino porque el riesgo de que todo salga mal es bastante alto.
En cambio, comprar en empresas o plataformas confiables como motorcompleto.com, donde se especializan en motores de segunda mano provenientes de desguaces o de particulares, donde son revisados y puestos a punto para vender solo lo mejor en cuanto a rendimiento y calidad, parece ser una opción mucho más inteligente.
Esto brinda muchos beneficios: la seguridad de los pagos, un mejor precio garantizado, la certeza de su funcionamiento y mucha variedad desde la cual escoger.
Leer bien las descripciones antes de tomar una decisión de compra
Por lo general, las páginas de compraventa y sobre todo las empresas que se especializan en la venta de motores de segunda mano para coches tienen la particularidad de ser bastante específicas en las descripciones de los productos que tienen en stock. Desde luego, se trata de un motor que ha sido utilizado en otro coche y que tendrá un historial de utilización, de mantenimiento, especificaciones bastante detalladas y características únicas.
Por lo tanto, una manera de cerciorarse de que se está tomando una buena decisión de compra es sencillamente prestar atención a los detalles que se colocan en la propia descripción. A menudo, no hace falta más que leer para percatarse de si se está ante un motor de segunda mano que es una real oportunidad de mejorar el rendimiento del coche propio, o se está ante un motor que no funcionará o requerirá más gastos antes de echarlo a andar.
Comparar y elegir la mejor opción
Una de las ventajas de páginas como ventademotores es que tienen, a veces, hasta 10 o 15 unidades de motores de segunda mano para el mismo modelo de coche. Por lo tanto, hay al menos 10 o 15 posibilidades de encontrar el motor ideal, por especificaciones y precio.
En esos casos, lo mejor es poder revisar y comparar las especificaciones de cada uno, ya que muchas veces variarán únicamente en el kilometraje y el precio final.
De lo contrario, se puede siempre solicitar más información o asesoría, en el caso de la página antes citada, lo que puede venir bien para esclarecer dudas y luego sí, proceder a la compra.
Sin nada que envidiar
Los motores de coche de segunda mano no necesariamente tienen algo que envidiar a los motores nuevos. En términos de eficiencia y de vida útil, tal vez, pero en rendimiento y sobre todo en precio la cuestión termina siendo equiparable o favorable para los motores de segunda mano.
Por eso es un mercado en auge. Las personas necesitan reparar sus coches de la mejor manera posible, y a menudo, gastando lo menos posible. Y aunque hay piezas de recambio y partes en las que no conviene jamás comprar productos de segunda mano, en los motores de coches, que no suelen tener mayor desgaste cuando han tenido una utilización tranquila durante su vida útil, las posibilidades de comprar con éxito son muy elevadas y todo pasará por hacer buenas elecciones, como se ha mostrado en párrafos anteriores.
