Dentro de su amplia propuesta teatral, el festival Russafa Escènica dio cabida en su sección ‘Viveros’ al estreno de la pieza ‘Bragas a 2 euros, teatro a 10’ de la compañía valenciana Entre4paredes Producciones. Bajo la firma de Irene González (y sello en la codirección e interpretación de la propia González junto José Torres), la obra se presenta como una disparatada comedia que pone sobre la escena las circunstancias que rodean (con sus luces y sus sombras) a la propia productora y por ende, a sus propios protagonistas. ¿Metaficción?, ¿metarealidad?, ¿ficción referencial?... Partamos del propio título de la obra: la relación entre el puesto del mercadillo barrial como contrapunto al relato que ofrece la dramaturgia puede ser válida desde un punto de vista, la de un producto a la venta. Si la supervivencia del producto depende del relato de quien lo anuncia, la narrativa teatral se ve obligada a constituir un peso más sustantivo. El binomio mercadillo/teatro solo puede salir adelante (de ser el teatro un mercadillo), desde un enunciado urticante, quizá por eso González acierta al plantear su texto bajo el juego de bragas a precio irrisorio y la propuesta teatral, también.
La obra, de unos 35 minutos de duración, sitúa a sus dos personajes (los propios componentes de la compañía), ante un entorno de precariedad laboral (la obra arranca con los protagonistas recibiendo al público ante un supuesto picnic veraniego tan costumbrista como vulgar), que señala su modelo de vida y la inestabilidad de su oficio. Con mucha dosis de humor (y jugando con el absurdo y la exageración), la dupla González/Torres nos llevan al territorio del ‘lado oscuro’ de las compañías, y los intérpretes, que buscan abrirse camino en el oficio (aun contando con un bagage favorable), frente a una administración, programadores, festivales, salas…, que ponen trabas a las propuestas que presentan.
‘Bragas a 2 euros, teatro a 10’ desnuda, moviéndose en el espacio de la comedia hilarante, las dificultades por la que atraviesan compañías como Entre4paredes Producciones. No es fácil ver obras que ponen su foco sobre las problemáticas que acompañan a las empresas que se mueven en pequeñas producciones; sin duda Irene González y José Torres manifiestan, a modo de terapia, su descontento en el sector con agridulce ironía y sarcasmo sin olvidarse que hacen teatro/teatro para reírse de un mercadillo al que el mundo de la escena no debería caer. ¿La queja como tema? Descartes decía aquello de que “la queja desacredita” a sus compañeros de oficio y ‘Bragas a 2 euros, teatro a 10’ escapa de la queja y reproche en busca de que se tenga en cuenta la labor profesional de aquellas compañías incansables en crear y ofrecer sus productos. ¿Malestar? Sí, con humor desaforado y dando un toque de atención. Como siempre, la dupla González/Torres se entiende perfectamente dando un muy buen trabajo actoral (hay que ver la vis cómica que desprende Irene González y cuánto juego da). Hasta el 30 de septiembre tiene oportunidad de disfrutar de esta traviesa y punzante comedia, no desaprovechen la ocasión.
