Podem València ha presentado alegaciones al Plan Hidrológico del Júcar a fin de defender la Albufera frente a la disminución del caudal procedente del citado río y mejorar la calidad del agua del lago que llega del río, de las acequias, las aguas que rebosan del alcantarillado y de las plantas depuradoras.
Chelo Poveda, portavoz de Podem València, ha explicado que esta exigencia, como estable el artículo 45 de la Constitución y el 191 del Tratado Fundacional de la UE, "impone estos deberes explícitamente a las administraciones públicas, cosa que como demuestra la realidad no se cumple en la Albufera ni en otros humedales del país, como Doñana o el Mar Menor"
Poveda, además, recalca otras normas de aplicación, como la Ley de Aguas, la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y Biodiversidad, la normativa sobre Parques Naturales, o las exigencias de protección que rigen sobre la Albufera por ser un espacio de los reconocidos en el Convenio Ramsar, dirigido a proteger los humedales de mayor valor por su biodiversidad, así como la protección de la Albufera por la UE como la Zona Especial de Protección de Aves incluida en la Red Natura 2000.
Chelo Poveda señala, entre los problemas fundamentales que tienen que ver con el agua que recibe nuestro humedal, la falta de caudal y la mala calidad del agua, temas en los que se centran las soluciones propuestas. Así, apunta al notable descenso del aporte del Júcar, que en las décadas de los años 60 y 70 aportaba más del doble de caudal que aporta en la actualidad fundamentalmente por diversas circunstancias debidas a la acción humana (agricultura de regadío donde antes no había, sequía por el cambio climático, etc.).
Para proteger la Albufera, Podem Valencia ha solicitado, entre otras alegaciones, el aumento de la aportación de caudal de la cuenca del Júcar hasta ascender a 206hm3/año destinados al marjal/arrozal (70hm3 en época invernal siguiendo el Plan Especial de la Albufera y 136hm3 para el cultivo del arroz) y entre 250 y 280hm3/año destinados al lago; la mejora de multitud de instalaciones del entorno de la Albufera; el control de la calidad del agua, reduciendo el límite de fósforo de los vertidos de las aguas residuales a 0,3mg/l e intensificar el control sobre el uso de productos fitosanitarios y nitrogenados en la agricultura para garantizar la calidad del agua.
"No hay planeta B, ni otra Albufera que cuidar"
Con estas alegaciones la portavoz de Podem Valencia interpela a la administración a adecuar el Plan Hidrológico del Júcar a la realidad de la Albufera y a proteger el medio ambiente recordando “que es imprescindible para el futuro del planeta y del humedal la utilización racional de los recursos y compatibilizar los usos económicos con los medio ambientales, pero es incompatible con la vida poner los intereses económicos por encima de los medio ambientales. No hay planeta B, ni otra Albufera de Valencia que cuidar más que la nuestra”.
