La estrategia de desarrollo urbano sostenible e inteligente (EDUSI) elaborada por el Ayuntamiento de Quart de Poblet para obtener fondos europeos con los que financiar su conversión hacia la 'smart city' empieza a tomar forma más allá del papel con las licitaciones de redacciones de proyectos y de ejecución de los mismos que se están sucediendo en las últimas semanas. Entre ellos, el suministro e instalación de un sistema para la gestión y control de aparcamiento de vehículos en la vía pública por 90.000 euros que ha salido a licitación esta misma semana.
Son varios los proyectos incluidos en la EDUSI relacionados con la movilidad que ya están tomando forma. Uno de ellos es la instalación de sensores en la vía pública que permitirán avisar a través de pantallas e, incluso, de una app, de los aparcamientos libres disponibles en la localidad.
Con ello se pretende reducir el tiempo en el que los vehículos a motor están circulando por el casco urbano buscando aparcamiento. La implantación de este sistema se hará paulatinamente y es probable que comience por el aparcamiento situado junto a la biblioteca municipal.
Dentro de estos proyectos, en el área de Urbanismo, también se va a ejecutar la construcción de un aparcamiento público en la calle del Tribunal de las Aguas. La redacción del proyecto ya ha sido licitada y adjudicada.
Se trata de una nueva zona de parking situada en un solar, a las afueras del casco urbano, que tiene un desnivel que se va a aprovechar para hacer un aparcamiento de dos plantas que no será subterráneo ni implicará excavar. Sobre él, se instalará una zona de esparcimiento con arbolado y placas solares y otros sistemas de energías renovables que permitirán iluminar y dar servicio al propio aparcamiento y también a la plaza.
El aparcamiento, al estar a las afueras, servirá como disuasión para los conductores quienes podrán dejar ahí el vehículo y desplazarse por el casco urbano a pie o en bicicleta. Ello permitirá reducir considerablemente el volumen de tráfico rodado por las calles del municipio con la disminución que ello conlleva tanto de polución como de contaminación acústica y ayudando a convertir Quart de Poblet en una ciudad más segura y amable para los vecinos.
