8 años después de la colocación de la primera piedra, Torrent deberá esperar aún un poco más para colocar la segunda piedra del esperado Palacio de Justicia. En aquel momento el entonces conseller de Justicia y Administraciones Públicas, Fernando de Rosa, anunció en junio de 2008 a la entonces alcaldesa de Torrent, Mª José Català, el inicio de las obras.
De la Rosa anunció en aquel momento que “en 2011 entrará en funcionamiento el Palacio de Justicia, un edificio que se licitará en 2009 y que permitirá pasar de ocho juzgados a 17, y que además dará cobertura a toda la comarca”.
8 años después, el alcalde de Torrent, Jesús Ros, censuró este “nuevo regalo sorpresa que el PP nos dejó. No es el único. También nos dejó el famoso hospital de Torrent. Que encima nos costó 60.000 euros del famoso poste. Es lo único que hay del hospital”.
Ros explicó que la no construcción del Palacio de Justicia ha costado a las arcas municipales más de 350.000 euros (IVA no incluido). Esa cantidad viene derivada del pago de los alquileres de la Plaza de la Libertad (bajos números 8 y 9) por importe de 1.135 más IVA al mes contratados desde el año 2003 y del alquiler del bajo en el número 18 de la plaza de la Libertad para los casos de violencia de género por 1.626 más IVA desde el año 2006, según confirmaron posteriormente fuentes municipales.
Las citadas fuentes confirmaron que de ambos alquileres se hacía cargo el Ayuntamiento además de otros gastos como IBI, agua o luz. El alcalde explicó que “por suerte desde febrero de 2015 la conselleria de Justicia se ha hecho cargo del pago de los alquileres y de los gastos derivados”.
Ros preguntó cuando se pondrá la segunda piedra de la nueva Ciudad de la Justicia, que estará situada en una parcela de Parc Central de más de 22.000 metros cuadrados. El proyecto, según de Rosa “una de las prioridades de la Generalitat", estaba presupuestado en 23.476.000 euros.
Según se publicó en 2008, el edificio que albergará el Palacio de Justicia está previsto que tenga hasta siete alturas donde se ubicarán las salas de vista así como los diferentes juzgados de instrucción. El edificio tendrá cinco plantas de altura y dos de sótanos. La nueva sede contará con un juzgado de guardia, ocho salas de vistas, otra sala con un aforo amplio, registro civil, decanato, fiscalía, calabozos y clínicas forenses.
De momento, según confirmó Ros, la segunda piedra tendrá que esperar.
