La Sindicatura de Comptes ha realizado un informe de fiscalización de los ejercicios 2019 y 2020 del Ayuntamiento de Alboraya, en el que ponen de manifiesto determinados incumplimientos significativos de la normativa aplicable a la gestión de los fondos públicos.
La sindicatura también advierte de la posible negligencia en una serie de procesos fundamentales para el correcto desarrollo de la Administración: no llevar a pleno los informes de reparos; no presentar los presupuestos en el formato estipulado por ley; no fiscalizar los gastos; no comprobar los ingresos; y no hacer inventario de los bienes del consistorio, "lo que impide a los vecinos de Alboraya que puedan saber de qué dispone el Ayuntamiento".
Mejoras en la gestión económica-financiera
En el informe de fiscalización se recogen diversas recomendaciones con la finalidad de mejorar la gestión económico-financiera del Ayuntamiento de Alboraya. La Sindicatura recuerda que está pendiente la disolución de la sociedad Centro de Respuesta Integral de Alboraya, SL (CRIDA), puesta en marcha en la etapa de gobierno de Manuel Alvaro, en cumplimiento del acuerdo de la propia sociedad de fecha 23 de diciembre de 2013.
La Sindicatura de Comptes recuerda al Ayuntamiento que debe elaborar de forma adecuada los presupuestos de cada ejercicio, con los documentos y anexos que en ellos se integran, procurando que se recojan los créditos suficientes para atender el cumplimiento de las obligaciones que, como máximo, se puedan realizar en el ejercicio, “con la finalidad de no tener que recurrir a los expedientes de reconocimiento extrajudicial de créditos”.
El organismo autonómico también hace memoria al consistorio sobre agilizar la gestión administrativa y la recepción de las facturas durante el ejercicio presupuestario “con la finalidad de que no tengan que ser imputadas al presupuesto del ejercicio siguiente”.