El Valencia Basket logró un triunfo de enorme mérito en Málaga frente al anfitrión Unicaja (87-93), en un Martín Carpena encendido

El equipo de Pedro Martínez mostró madurez y carácter competitivo, siendo capaz de sobreponerse a un arranque adverso y sostener la ventaja en un desenlace de máxima presión. Es la tercera final de Supercopa de su historia, que disputará mañana a las 19h ante el ganador del Real Madrid–Lenovo Tenerife.
El empuje inicial de Unicaja
El cuadro local salió en tromba. Perry abrió con un triple y Kravish, muy inspirado, amplió la renta hasta los siete puntos en el minuto 6 (20-13). Pedro Martínez detuvo el partido para frenar la avalancha. Aunque Iroegbu y Moore recortaron, el primer cuarto se cerró con ventaja clara para los malagueños (26-18).

Reacción taronja antes del descanso
En el segundo periodo, el Valencia fue encontrando soluciones. Costello, De Larrea y Thompson lideraron la remontada, con un triple del base vallisoletano que puso a los taronja por primera vez arriba. El intercambio de golpes fue constante y una bandeja de Moore sobre la bocina dejó el marcador ajustado al descanso (44-43).
El partido cambia de manos
Tras la reanudación, el Valencia subió la intensidad defensiva y encontró vías de anotación con Taylor y Puerto. Thompson conectó con Sako para un alley-oop que levantó a la grada visitante y Moore apareció para firmar acciones de calidad. Un triple de Iroegbu sobre la bocina dio ventaja taronja al final del tercer cuarto (71-73).

Un desenlace de temple
El último periodo fue un ejercicio de resistencia. Moore, decisivo, castigó desde fuera y en penetración, mientras De Larrea sumaba desde el triple y el tiro libre. A pesar de la presión de Kalinoski y Kravish, Valencia mantuvo la calma en el tramo final. Una antideportiva sobre De Larrea a 12 segundos del final certificó la victoria por 87-93.

Análisis estadístico del triunfo
El conjunto de Pedro Martínez cimentó su victoria en el acierto exterior: 12/34 en triples (35%) frente al 7/33 de Unicaja (21%).
Pese a perder la batalla del rebote (47 a 30), la disciplina táctica y el control de pérdidas (sólo 9 frente a 14 del rival) resultaron claves.
Desde la línea de personal, el Valencia también se mostró fiable (19/26, 73%).
A nivel individual, Omari Moore fue la gran figura con 20 puntos, 6 rebotes, 4 asistencias y 26 de valoración.
Le secundaron Sergio de Larrea (15 puntos, 2 triples y temple en el desenlace) y Iroegbu (11 puntos con lanzamientos vitales).
Taylor aportó 10 puntos y 3 asistencias, mientras Thompson dirigió con criterio (6 asistencias).
En Unicaja, Kravish (14 puntos y 4 asistencias), Duarte (13 puntos, 5 rebotes) y Perry (12 puntos, 5 asistencias) fueron los más destacados, pero el bajo acierto exterior lastró a los locales.
Un triunfo coral y de carácter que sitúa al Valencia Basket en otra final, con la ilusión intacta de levantar un título de prestigio.