El primer capítulo de la final de la Liga Endesa se tiñó de blanco. Valencia Basket no pudo arrancar con victoria en el WiZink Center ante un Real Madrid que impuso su veteranía, físico y acierto en los minutos decisivos para firmar el 1-0 en la serie (89-75)
Los de Pedro Martínez plantaron batalla durante tres cuartos con fases de buen juego colectivo, pero se desinflaron al inicio del último acto, momento en el que el conjunto de Chus Mateo apretó el acelerador con Feliz, Llull, Bruno Fernando y Musa marcando diferencias.
Arranque esperanzador con personalidad y triples
Pedro Martínez apostó de salida por su quinteto más reconocible: Jean Montero, Brancou Badio, Semi Ojeleye, Jaime Pradilla y Nate Reuvers. Y la puesta en escena fue convincente.
Tras una canasta inicial de Hezonja a los cinco segundos, el equipo taronja respondió con contundencia: triples de Badio y Reuvers en menos de un minuto y canasta al poste de Pradilla para colocar el 4-8.
Poco después, un triple de Montero estiraba la renta hasta el +7 (4-11), en la que fue la mayor ventaja visitante del encuentro.
Sin embargo, la reacción blanca no se hizo esperar. Un parcial de 11-0 con Abalde abriendo fuego desde el perímetro y Tavares imponiendo su ley bajo los aros dio la vuelta al marcador.
El conjunto valenciano acusó la falta de contundencia en la pintura ante el gigante caboverdiano, mientras el acierto exterior comenzaba a apagarse.
Chris Jones rompió la sequía con una canasta desde media distancia, pero Llull, muy activo en la rotación blanca, respondió con una bandeja sobre la bocina para cerrar el primer cuarto con ventaja local (19-15).
Un segundo cuarto de poca puntería y mucha batalla táctica
El segundo cuarto arrancó con un mate de Reuvers que dio algo de oxígeno, pero las defensas dominaron el ritmo del juego.
Con los dos equipos negados desde el 6,75 y abusando de la media distancia sin éxito, se vivieron minutos trabados, donde los tiros libres tomaron protagonismo.
El Real Madrid aprovechó una fase de cinco puntos seguidos de Andrés Feliz para abrir brecha (28-22), obligando a Pedro Martínez a pedir tiempo muerto en el minuto 14.
La pausa surtió efecto: dos triples consecutivos de Costello y Josep Puerto igualaron el marcador (28-28) y devolvieron la esperanza a un equipo que sobrevivía gracias a su esfuerzo defensivo.
Musa, Tavares y Abalde volvieron a poner por delante al conjunto blanco, pero un par de acciones individuales de Jones –con una destacada lectura en el uno contra uno– mantuvieron al Valencia Basket con vida al descanso (35-32), tras una primera mitad espesa, con protagonismo de los errores y la dureza física.
El estallido de Badio en el tercer cuarto cambia el guion… por unos minutos
La reanudación fue frenética. Campazzo abrió con un triple, pero Ojeleye respondió de inmediato, seguido de otro triple de Badio que empataba el choque a 38. Un 2+1 del senegalés culminaba un parcial de 0-9 que devolvía la ventaja a los taronja (38-41).
Era el mejor momento del partido para los de Pedro Martínez. La movilidad ofensiva, la circulación de balón y el descaro de Badio –que firmó 15 puntos en este cuarto– encendieron las alarmas en el banquillo blanco.
Abalde y Hezonja cortaron la racha valenciana, pero Pradilla –tras capturar un rebote ofensivo– no dudó en lanzar desde el triple para poner el 42-48.
Valencia mantenía la compostura, incluso cuando el Real Madrid volvió a ponerse por delante gracias a la intimidación de Tavares y el acierto de Musa (49-48).
A 4:30 del final del cuarto, Martínez volvió a parar el partido para reorganizar a los suyos, que aguantaban gracias al liderazgo ofensivo de Badio y una gran acción de De Larrea (2+1).
Pero otro arreón blanco con Feliz y Hezonja desde el perímetro colocó el 62-55. Un último esfuerzo de Pradilla bajo el aro y un nuevo zarpazo de Llull cerraron el tercer acto con un ajustado 64-60.
Desconexión definitiva: el Real Madrid impone su fondo de armario
Lo que hasta entonces había sido una batalla igualada, se rompió en apenas tres minutos del último cuarto. Los errores de Pradilla y Montero en los primeros ataques de Valencia abrieron la puerta a un parcial contundente de los locales.
Musa y Llull golpeaban desde el exterior, mientras Bruno Fernando –con potencia y precisión– hacía daño en la pintura. Un 2+1 del angoleño y una bandeja de Feliz llevaron el marcador hasta el 76-62, encendiendo las alarmas en el banquillo taronja.
Pedro Martínez intentó cambiar el ritmo con una configuración de tres exteriores, pero el Madrid controlaba ya el tempo del partido.
Jones trataba de anotar en transición, pero la ofensiva visitante era atropellada y previsible. Bruno Fernando seguía castigando y Feliz, incansable, ponía el 84-66 con algo más de tres minutos por disputarse. El partido estaba sentenciado.
En los compases finales, De Larrea y Soriano maquillaron el marcador con alguna acción de mérito, pero el daño estaba hecho.
El 89-75 final deja claro que al Valencia Basket no le basta con momentos de inspiración para ganar una final: necesita continuidad, más aportación de sus referentes ofensivos (Montero acabó con solo 3 puntos) y ajustes en defensa para contener a jugadores como Tavares, Feliz o Musa.
Toca reaccionar y mirar a 2017 como espejo
Aunque la derrota deja sensaciones agridulces, la eliminatoria está lejos de estar decidida. El equipo de Pedro Martínez ya vivió una situación similar en 2017, cuando también cayó en el primer partido en Madrid y acabó ganando el título en La Fonteta.
Ahora, con el segundo asalto programado para el domingo a las 18:30 horas, el Valencia Basket tendrá una nueva oportunidad de recuperar el terreno perdido antes de llevar la serie a su feudo.
Será imprescindible una versión mucho más coral y agresiva para romper la solidez blanca. Porque si algo ha dejado claro este primer envite es que para ser campeón no basta con competir tres cuartos: hay que mantener el pulso los cuarenta minutos.
Ficha técnica
89 – Real Madrid (19+16+29+25): Campazzo (12), Abalde (6), Hezonja (7), Ndiaye (-), Tavares (14) -cinco inicial-, Llull (11), Garuba (4), Feliz (18), Hugo González (-), Bruno Fernando (6), Musa (11), Rathan-Mayes ().
75 – Valencia Basket (15+17+28+15): Badio (20), Montero (3), Ojeleye (5), Pradilla (7), Reuvers (5) -equipo inicial-, Jones (10), López-Aróstegui (7), Soriano (4), Costello (8), De Larrea (3), Puerto (3), Sestina (-).
Árbitros: Antonio Conde, Carlos Cortés y Arnau Padrós. Sin eliminados.
