La alcaldesa de Torrent, Amparo Folgado, ha criticado la liquidación recibida por parte del ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico por el canon de ocupación de dominio público hidráulico por dos pasarelas peatonales que, a día de hoy, ya no existen. Ambas fueron arrasadas por la DANA del pasado 29 de octubre de 2024.
La alcaldesa calificó la liquidación como "una afrenta institucional" y "un sinsentido moral". Según explicó, el Gobierno de España reclama el pago por el uso de un espacio ocupado por dos estructuras que han sido totalmente destruidas. Folgado resumió con dureza que "no hay ocupación. No hay uso. No hay beneficio, y ahora, una factura del Estado".
Las pasarelas afectadas eran utilizadas por cientos de vecinos a diario. Una conectaba el CEIP Juan XXIII, en el barrio del Xenillet, con la otra orilla del barranco del Poyo. La otra facilitaba el acceso entre la calle Perellonet y el polígono industrial Mas del Jutge, cruzando el barranco de l’Horteta. Ambas estaban ubicadas sobre cauces gestionados por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).
Los daños se produjeron el 29 de octubre, cuando la DANA provocó un colapso de la red fluvial y desbordamientos en varios puntos del término municipal, tras haber llovido más de 700 litros por metro cuadrado en su cabecera. El agua, mezclada con cañas, residuos y toneladas de materiales vegetales acumulados por años de inacción de la CHJ y falta de limpieza en los barrancos, acabó arrastrando las pasarelas.
Desde entonces, la Generalitat Valenciana ha asumido el coste de su reconstrucción, mientras que, según afirma Folgado, el Gobierno de España, a través de la CHJ, permanece al margen.
Folgado critica también el silencio absoluto del ministerio y de la CHJ desde la tragedia y critica que "han pasado seis meses y el Gobierno ni se ha preocupado en venir a ver en qué estado están sus barrancos en Torrent. Ni siquiera saben que esas pasarelas ya no existen".
La alcaldesa no se limita a rechazar el canon. La primera edil también ha vuelto a lanzar una petición clara al Gobierno de España: la construcción urgente de un Plan Sur para el barranco del Poyo y l’Horteta, inspirado en el proyecto que protege a València tras la riada de 1957
En ese sentido, Amparo Folgado insiste en que no se puede olvidar al barranco de l’Horteta, que según el último estudio de la Universitat de València, canalizó más caudal que el propio barranco del Poyo durante la DANA.
La situación es tal que, hace apenas dos semanas, un episodio de lluvias moderadas (40 litros por metro cuadrado en Turís) provocó un nuevo desbordamiento del barranco de l’Horteta a su paso por Torrent. Folgado lamentó que "con toneladas de arrastres aún en el cauce desde octubre, su capacidad es ahora menor que antes. No se ha hecho nada. Seguimos igual o peor".
La alcaldesa destaca que "no podemos estar en Torrent en alerta constante cada vez que caen cuatro gotas. La ciudadanía merece seguridad, no sobresaltos, y eso se consigue con actuaciones reales, no con cartas de cobro".
Por eso, reclama al Ministerio para la Transición Ecológica que actúe desde las cabeceras de los barrancos (Poyo, l’Horteta, Gallego y la Saleta) y no se limite a intervenciones parciales al final del cauce. La alcaldesa asegura que "si no se actúa en origen, todo lo que se haga en el tramo final es inútil".
Desde el Ayuntamiento de Torrent se va a solicitar a la CHJ la paralización inmediata del cobro del canon, y se va a remitir una carta al ministerio dirigido por Sara Aagesen, exigiendo una revisión de los criterios de aplicación de los cánones hidráulicos.
Se propone que se exima del pago en los casos en que: no exista ocupación real del dominio público; las infraestructuras estén destruidas por desastres naturales; el ayuntamiento o la ciudadanía no obtengan ningún uso ni beneficio o las obras de restitución corran a cargo de otras administraciones.